La Habana, Cuba - El periodista independiente Maykel Armenteros Rodríguez, quien se mantuvo en condición de anonimato mientras colaboraba con medios como Cubanet, salió recientemente de Cuba rumbo a los Estados Unidos.

El reportero Enrique Díaz Rodríguez, confirmó al Instituto Cubano de Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) la labor de Armenteros Rodríguez en el periodismo independiente en la isla, prácticamente desde el 2016, a pesar de que nunca hizo público su nombre.

“Maykel durante mucho tiempo estuvo trabajando con nosotros, tributando para Cubanet, específicamente en esto de la edición de audiovisuales; muy buenos trabajos salieron a la luz pública porque él salía a las calles a buscar imágenes, fotos para fotorreportajes; hacía de todo, realmente era multifacético en esto de proveer materiales”, reveló Díaz Rodríguez, quien colabora con Cubanet.

Asimismo, el periodista independiente asegura que Armenteros Rodríguez se mantuvo de forma anónima, protegido, porque “estas personas que uno tiene protegidas y que la Seguridad del Estado no las ficha, son importantísimas debido a que pasan desapercibidas buscando información”.

“Es una tónica que nosotros manejamos durante mucho tiempo, esto de desprendernos del nombre, del protagonismo para salir tras la noticia y ha dado mucho resultado, en este caso con Maykel y otros tantos que hay por ahí trabajando de igual forma”, puntualizó.

Según cuenta Enrique Díaz a ICLEP, Maykel Armenteros fundamental en el reporteo del 11J, pues “salió a la calle a recopilar información, a buscar imágenes grabadas por él, lo mismo en La Habana que en La Güinera”, en el municipio Arroyo Naranjo.

La salida de Cuba de Maykel Armenteros fue una decisión personal. “Trabajó durante mucho tiempo con nosotros bajo esta condición de anonimato, que nada demerita la labor que estaba haciendo sino como un medio de protección”, recalcó Díaz Rodríguez.

El ICLEP ha registrado en lo que va de año casi 30 periodistas que han emigrado por diferentes motivos entre el que predomina la falta de esperanza y la persecución política.