Artemisa, Cuba, (ICLEP). Las bóvedas en el cementerio de Artemisa prácticamente permanecen abiertas, pues los trabajadores afirman que hace meses no reciben cemento para el sellado de las mismas. El camposanto ha sido por muchos años blanco de robos de restos humanos y esta situación facilita aún más ese tipo de hechos.

Sobre el tema, Odalis Carpio Valero, una ama de casa residente en el municipio Artemisa, comentó con este boletín: “Es vergonzoso que tengan las tumbas en esas condiciones, ni porque aquí mismo hay una fábrica de cemento”.

Asimismo la estomatóloga Damaris Campos Loaces, vecina de la cabecera provincial, opinó: “Yo me he enterado de los robos en las tumbas, y creo que lo primero que se debe hacer es garantizar la seguridad para evitar que pasen ese tipo de cosas”.

Por otra parte, el olor que sale del interior de las tumbas provoca molestias a trabajadores y dolientes, además de que es común que de ellas salgan ratas y otros insectos generando una situación antihigiénica.

“Si no nos dan el cemento para sellar las bóvedas, ¿qué vamos a hacer? Ojalá el problema se resuelva rápido porque a veces uno no sabe cómo va a mirar a los familiares de los difuntos”, compartió con El Majadero el sepulturero Yulier Espinosa Gaínza.

Publicado originalmente en la edición 234 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa