La Habana, Cuba, (ICLEP). Los tradicionales platos y vasos de cristal atraviesan un proceso de extinción en los hogares habaneros, como consecuencia de la ola inflacionaria que sufren los cubanos. Estos útiles domésticos están siendo sustituidos por sus similares de plástico que, aunque contraproducente su uso por normas sanitarias, se adquieren mucho más baratos.

Un juego de seis platos de cristal puede costar hasta más de 4 000 pesos, tanto en sitios particulares como estatales; mientras que el mismo conjunto de platos plásticos 420 pesos. “El problema es comer, no importa si es en plato de cristal o plástico. Yo vi en la librería Rubén Martínez Villena, ahí frente al Capitolio, un juego de vasos de cristal en 3 500 pesos. A mí me parece que se les fue la mano, pero así se está viviendo en La Habana”, dijo a Amanecer el ciudadano Guillermo Esquivel Ledesma, vecino de calle Ánimas, en Centro Habana.

Al respecto, la capitalina Aymara Naranjo Llanes, residente en la calle San Antonio, en el municipio San Miguel del Padrón, expresó al boletín que “ya no se hace diferencia entre los abusos del estado y los particulares”.

“Pude ver, nadie me lo contó, en la tienda estatal América Libre del boulevard, cada plato de cristal a 575 pesos. Es una locura. Me quedo con las cosas plásticas”, agregó. La funcionaria de la Empresa Provincial de Comercio, Yanelis Perdomo Hernández, indicó a los reporteros que el Gobierno diseña los precios en función del costo de la adquisición.

“Bajar precios se redundaría en pérdidas para la empresa y ya no estamos en tiempo de subsidiar nada, por muy doloroso que sea”, indicó finalmente.

Publicado originalmente en la edición 220 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Amanecer Habanero.