La Habana, Cuba. La selección juvenil de béisbol de la capital marcha al frente del torneo nacional de su categoría, entre 15 y 18 años, pese a los graves problemas que enfrenta para la transportación, alimentación y falta de recursos para entrenar. “Los muchachos entrenan con guantes viejos con el objetivo de utilizar los mejores en los juegos de verdad.

La provincia no tiene con qué asegurarle los implementos. Los que ellos tienen es porque los padres se los compran”, declaró a Amanecer Habanero Humberto Millán Delgado, trabajador en el estadio Santiago Changa Medero y residente en Plasencia entre Carlos III y Estrella, en Centro Habana. Por su parte, Dasiel Soto Morejón, ex-entrenador de la categoría 8-9 años y vecino de Enrique Barnet entre Plasencia y Xifre, señaló a este medio que la semana pasada a los muchachos le sirvieron en la cena en dos ocasiones continuas “arroz y chícharos y ningún plato fuerte”.

Carlos Montesinos Gutiérrez, quien vive en la calle 47 entre 28 y 30, en el municipio Plaza de la Revolución, opinó que esa es una de las razones por la cual los jugadores se van del país “siendo casi niños”. René Jiménez León, funcionario de la Dirección Provincial de Deportes en la capital, dijo a este medio que las condiciones que atraviesa el país son muy difíciles. “No contamos con las condiciones para garantizar los aseguramientos de los muchachos”, concluyó. A pesar del abandono de las autoridades, el paso del equipo juvenil capitalino es arrollador, con balance global de 14 juegos ganados y uno perdido.

Publicado originalmente en la edición 209 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Amanecer Habanero.