La Habana, Cuba - Ponen habaneros en la picota pública al régimen, debido al contraste entre el número de edificios abandonados que pudieran recuperarse y el incremento de personas sin hogar.

Los ejemplos concretos de edificios abandonados por toda la ciudad, que de repararse pudiera servir de viviendas, están arrinconando al régimen y sus gastadas justificaciones sobre el deterioro del fondo habitacional en la capital.

El capitalino Andrés Álvarez dijo a Amanecer Habanero que “frente a La Época hay un edificio que lleva años abandonado que bien pudiera repararse y se resolverían unas cuantas casas”.

A lo que añadió Loida Cuesta: “Hay una pila de edificios así. Si se decidieran a recuperarlos estoy convencida de que muchos resolverían su problema de la vivienda”.

Omar Aguiar, trabajador de la dirección provincial de la vivienda, dijo: “La política es incentivar a que las personas construyan sus viviendas por esfuerzo propio con la entrega de créditos”. Luego agregó que “justo ahora no hay un programa oficial para reparar esos edificios”.

La política de la dictadura de volcar sus esfuerzos en las zonas conocidas como vulnerables responde a un marcado interés por mejorar su imagen como sistema ideológico; y no a resolver los serios problemas de la carencia habitacional en La Habana.

Publicado originalmente en la edición 192 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Amanecer Habanero.