El pasado lunes la Empresa de Comercio Municipal vendió un picadillo en mal estado en la bodega del reparto Virginia, el cual causó problemas digestivos a las personas que lo consumieron, según informó al ICLEP, Maricela Fabelo Trimiño, vecina de ese lugar.

La señora asegura que su esposo y sus dos hijos sufrieron fuertes dolores de estómago, vómitos y diarreas, luego de haber consumido el picadillo que compraron en la bodega de su barrio el lunes por la mañana.

“Cuando mi esposo, que se llama Andrés Rodríguez Pacheco, compró el picadillo le dijeron que sólo estaba falto de frio. Yo me percaté de que tenía un olor fuerte y que su color no era el más adecuado, pero él insistió en que lo cocinara para el almuerzo. Una media hora después ya estaban vomitando, por lo que tuvimos que ir rápidamente al policlínico Marta Abreu”, explicó. La señora dijo que los médicos que los atendieron en el cuerpo de guardia del policlínico enseguida le preguntaron qué habían comido.

“Estando en el policlínico nos enteramos que las personas que habían comido picadillo estaban presentando los mismos síntomas, y que más de 30 de nuestros vecinos habían acudido a ese centro de salud para recibir atención médica”, relató. Rafael Zamora Pérez, administrador de la bodega donde se vendió el alimento en mal estado, le comunicó al autor de esta nota, que la venta del producto fue suspendida por indicación de Comercio, y los vecinos fueron alertados de la situación.

Publicado originalmente en la edición 121 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Páginas Villareñas