Guantánamo, Cuba- El cuentapropista Yasser Ravelo Díaz fue multado con el Decreto-Ley 370, el pasado 14 de mayo, en Guantánamo, por publicar denuncias y análisis en el medio independiente ADN Cuba.

El día anterior se personaron en su vivienda dos oficiales de la policía política, quienes le entregaron una citación para que se presentara a las 9 de la mañana en la sede de la Seguridad del Estado conocida como “Operaciones”, ante el teniente coronel Giorvis Hodelín Lamoth.

Citación entregada a Yasser Ravelo. Fuente: ICLEP

El motivo de la citación fue imponerle una multa de 3 mil pesos, en virtud del Decreto-Ley 370/2018, por sus videos publicados en ADN Cuba. Los encargados de aplicar la sanción fueron dos inspectores del Ministerio de Comunicaciones, identificados posteriormente como Reinier Speek Planche y Roberto Muñoz Rivas, quienes con anterioridad han impuesto, de conjunto con la Seguridad del Estado, este tipo de penalizaciones a opositores, activistas y periodistas guantanameros. Ravelo rehusó firmar la multa por considerarla injusta y los inspectores se negaron a entregarle el talonario, lo cual constituye una violación.

Además de esta sanción, le añadieron un acta de advertencia por expresar sus opiniones en redes sociales. La capitana Mabel, quien dirigió la acción represiva, lo amenazó con llevarlo a prisión e imponerle más multas de elevadas cuantías si continuaba ejerciendo su libertad de expresión, contó Ravelo en un video publicado por ADN Cuba.

“Le expliqué a ellos que si me vuelven a citar y me meten preso, yo estoy en una huelga total de hambre (…) y voy a estar en huelga de hambre hasta que la comunidad internacional no se pronuncie diferente con este gobierno macabro, con esta mafia comunista”, dijo el joven.

Una vez más, los oficiales de la Seguridad del Estado expusieron su particular interpretación de la libertad de expresión: “Ellos dicen: ‘puedes opinar, pero para adentro de ti’. No me da la gana porque la opinión para adentro de ti no es opinión”, afirmó Ravelo.

El Decreto-Ley 370 es una norma creada por el régimen cubano para restringir la libertad de expresión. Desde su puesta en vigor ha sido aplicada a más de 60 opositores, periodistas, activistas y ciudadanos en general. En su artículo 68 inciso i) establece como una contravención: “difundir, a través de las redes públicas de transmisión de datos, información contraria al interés social, la moral, las buenas costumbres y la integridad de las personas”, lo cual es interpretado de manera discrecional y arbitraria por el régimen cubano. Recientemente, el pasado mes de abril, fue sancionado con esta norma el periodista camagüeyano José Luis Tan Estrada.