La Habana, Cuba – El director ejecutivo del ICLEP y periodista Alberto Corzo quien fue golpeado brutalmente por dos desconocidos enviados por la policía política, el pasado viernes, se encuentra ingresado en una sala del Hospital Universitario Clínico Quirúrgico Faustino Pérez, en la provincia de Matanzas.

Anteriormente el periodista fue atendido en el Hospital Mario Muñoz Monroy, en Colón Matanzas, donde no pudieron diagnosticar con exactitud los tipos de lesiones que presentaba por la inexistencia de materias prima para realizar Rayos X, por lo que su hermano lo trasladó hacia el Hospital Faustino Pérez, en la cabecera provincial, donde le diagnosticaron una luxación clavicular y lo dejaron hospitalizado.

En la mañana de hoy uno de los hijos del comunicador pudo visitarlo y quedó muy impresionado de las condiciones en las que se encuentra su padre.

“Está como atolondrado, no se le entiende lo poco que puede hablar. Le tienen un suero intravenoso puesto y compresas en un ojo y en el hombre que no tiene vendado. Anoche le subió mucho la presión arterial”, confirmó al ICLEP Martha Liset Sánchez esposa del periodista.

Según Sánchez, existe mucho “secretismo” en torno a la hospitalización de su esposó pues no han podido acceder a información precisa del por qué lo hospitalizaron, teniendo en cuenta de que en Cuba no ingresan a nadie por una luxación.

“¿Por qué le tienen un suero puesto? ¿Qué medicamentos le están pasando? ¿Por qué mi esposo apenas puede hablar? ¿Por qué no existe un médico que nos responda todas las preguntas que queremos hacer y solo una enfermera es quien nos da muy poca información y a medias? ¿Por qué hospitalizaron al lado de mi esposo a una persona que supuestamente está siendo investigada por la policía, lo que conlleva que donde lo tienen talmente pareciera que está preso por la presencia policial las 24 horas?”, son interrogantes sin respuestas que se hace Martha Liset afirmando que “todo es muy oscuro” alrededor de su esposo.

“Quiero pensar de forma positiva y creer que a Corzo lo hospitalizaron por la cara dura del régimen que ahora está tratando de menguar el daño que le hicieron”, señaló.

Martha Liset asegura que “el único enemigo que tiene Alberto es la Seguridad del Estado, por el trabajo periodístico que hace, y que no existe casualidad que después de negarse a decirle a dos oficiales de la policía política a dónde pretendía ir, cuando estos lo interpelaron en la vía pública, fuera atacado por dos individuos desconocidos quienes no le robaron ninguna de sus pertenencias. Más claro ni el agua”.

La enfermera que está atendiendo al periodista hizo saber a la familia, que probablemente, será dado de alta médica este lunes 4 de abril.

Por su lado, el Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP), continúa responsabilizando al régimen de Cuba por cualquier afección o secuela física y/o psicológica con la que pueda quedar Alberto Corzo producto de la brutal golpiza de que fue víctima o por el sospechoso tratamiento médico al que es sometido.