La Habana, Cuba – El Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) condena enérgicamente a la dictadura cubana por la agresión contra su director ejecutivo Alberto Corzo quien fue agredido brutalmente por dos personas desconocidas enviadas por la policía política.

El directivo del ICLEP al poco rato de haber intercambiado palabras con los oficiales de la policía política conocidos por Fernando y Alexander Herrera fue atacado de forma sorpresiva por dos individuos especialistas en artes marciales quienes lo dejaron tirado en la carretera sin que le robaran ninguna de sus pertenencias.

Posteriormente el periodista fue recogido por un cochero quien lo trasladó al hospital Mario Muñoz Monroy del municipio Colón en la occidental provincia de Matanzas, donde le negaron certificados de lesiones, supuestamente, por no conocer en detalles los daños a su organismo ya que no le realizaron exámenes de Rayos X por la inexistencia de estos en la institución médica.

La dirección general del ICLEP pudo conocer a través de la esposa del periodistas, Martha Liset Sánchez, que mientras el reportero se encontraba en el hospital existía fuerte presencia de oficiales de la policía política encabezados por el conocido Ramón de Almas.

“El especialista en ortopedia que lo atendió le inmovilizó el brazo por posible fractura de clavícula y lesión en el codo de su brazo izquierdo, indicándole analgésicos”, añadió la esposa del periodista.

También Marta Liset especificó que su esposó al salir del hospital se dirigió a la unidad de la policía donde lo atendió un capitán, que se hizo llamar Ignacio, quien se negó a recepcionar la denuncia que el periodista quería hacer contra los oficiales de la policía política.

“En estos momento Corzo fue trasladado a la cabecera provincial, por su hermano, para ver si consiguen lo examine otro especialista y le realicen los exámenes médicos requeridos”, confirmó Sánchez cuando pudo tener un breve contacto telefónico con algunos periodistas del ICLEP y con la dirección general antes de que le volvieran a cortar las comunicaciones.

El matrimonio de periodistas compuesto por Alberto Corzo y Martha Liset Sánchez es víctima, de forma sistemática, de diferentes tipos de agresiones por parte del régimen cubano.

En el 2021 Corzo fue agredido unas 33 veces mientras que su esposa, en unas 25 ocasiones, fue víctima de la represión y acoso de la dictadura de Cuba. La detención arbitraria fue la agresión que más soportaron los comunicadores.

Los hijos de Corzo y Sánchez, de 10 años de edad, también son víctimas del régimen cubano por el simple hecho de que sus padres son periodistas independientes

En una ocasión fueron agredidos físicamente por su maestra y en otra por tres mujeres aleccionadas por la policía política. Las agresiones contra los niños han provocado que uno de ellos sufra un trastorno psiquiátrico obsesivo compulsivo.

El modus operandi de esta última agresión contra el periodista Alberto Corzo es igual a la que sufrió el pasado año la directora del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa, Mabel Páes, cuando dos personas encapuchadas se metieron en su casa y la golpearon salvajemente sin robarle nada.

El director general del ICLEP, Normando Hernández, condena a la tiranía cubana por “tan cobarde agresión contra el periodista Alberto Corzo, su familia y todos los periodistas cubanos”.

“Exijo justicia, que los cobardes y abusadores autores de la agresión contra nuestro director ejecutivo sean llevados a los tribunales. Que no exista impunidad”, señaló.