La Habana, 4 de enero, (ICLEP). Muchos capitalinos usaron el módulo alimenticio con espaguetis, coditos y arroz, entregado por el régimen el pasado mes de diciembre, con el objetivo de utilizar las ganancias para suplir la falta de otros alimentos básicos.

De acuerdo con un sondeo realizado por Amanecer Habanero, la mayoría de estos productos terminaron en el mercado negro.

De las 51 personas a las cuales se le preguntó sobre el destino y efectividad del paquete donado, 38 respondieron que los altos precios de otros alimentos los obligó a prescindir de gran parte del módulo o de su totalidad.

“Lo vendí completo. Por todo eso me dieron 700 pesos y en mi casa somos tres personas nada más”, contó Yusimí Aldana Guerra, residente en la calle Zulueta No. 662 entre Apodaca y Gloria, en el municipio La Habana Vieja.

Por su parte, Mónica Arguelles Blanco, vecina de la calle Concordia No. 425 entre Gervasio y Escobar, en el municipio Centro Habana, expuso la situación de su seno familiar: “Los frijoles por las nubes, de 200 a 250 pesos la libra (lb); una lb de tomates, incluso verdes, 120 pesos; una lb de cebollas 100. No podíamos quedarnos con el módulo”.

El funcionario en la dirección de Comercio en La Habana Vieja, Luis Lázaro Martínez González, dijo a reporteros de Amanecer Habanero que se ofertó lo que el gobierno tenía a mano; por tanto, “lo que haga cada cual es asunto privado”.

De las 38 personas que confirmaron la venta de productos del módulo, 26 dijeron que lo habían vendido en su totalidad, dígitos que indican la escasa significancia, en cuanto a prioridades de las familias, de los alimentos del paquete.

Publicado originalmente en la edición 205 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Amanecer Habanero.