Artemisa, Cuba, (ICLEP). DDos vacas fueron robadas en plena nariz del dueño y a las 12:00 del día en la zona conocida como la Curva de Lima, en las inmediaciones del poblado Cayajabos. El dueño de los animales solo se descuidó un momento para almorzar.

Pese a la temeridad de los matarifes, el hecho no causó sorpresa en la comunidad, localizada en la Carretera Central y no muy distante del municipio Bauta, pues no es el primer caso bajo esta naturaleza que tiene lugar en el territorio.

La osadía de los matarifes crece por días apoyada en el incentivo de la gran demanda del alimento, resultado del hambre reinante en la provincia e incluso, en la capital del país, donde recala parte del alimento. Este suceso continúa diezmando aceleradamente los campos de la Isla.

“Muchos dueños de animales, sobre todo caballos, duermen con los animales dentro de la casa; así y todo, no están seguro. Aquí han roto el último cuarto de una casa para robarse un caballo”, dijo al boletín el dueño de varias vacas Joaquín Rivas Cancio, residente en Cayajabos.

De igual forma el vaquero Conrado Díaz Llanes, radicado en La Curva de Lima, contó que del portal de la casa de los campesinos asociados a la cooperativa del asentamiento, en más de cinco casos, los matarifes se han llevado los animales, y de día.

Funcionarios de la oficina de Registro Pecuario en Bauta declinaron hacer comentarios a los corresponsales, sobre las causas del incremento de la desaparición de la masa bovina de los campos artemiseños.

Publicado originalmente en la edición 215 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa