Santa Clara, Cuba, (ICLEP). Los habitantes del barrio San Gil que compran sus alimentos en la bodega "El Puente" se encuentran preocupados por la escasez de pan que afecta al establecimiento desde hace nueve días. Según Bernardo Torres Sarrias, administrador de la bodega, la situación se debe a la falta de combustible en la Empresa de Comercio Municipal, lo que impide el funcionamiento del camión encargado de trasladar el producto desde la panadería hasta la bodega.

Torres Sarrias informa que los 877 consumidores registrados en la bodega no tienen otras opciones para conseguir pan, ya que en toda la zona no se comercializa este alimento ni siquiera en los establecimientos particulares que venden productos alimenticios. Esta situación ha generado molestias entre los vecinos del barrio, quienes se ven obligados a buscar alternativas para obtener pan para sus familias. Algunos han optado por comprarlo en barrios aledaños, mientras que otros han comenzado a preparar su propio pan en casa.

“Este barrio está ubicado a más de 17 kilómetros de la ciudad y los vendedores de pan no llegan hasta aquí. Nosotros informamos al puesto de mando de Comercio sobre la situación pero hasta el momento no hemos recibido una respuesta”, indicó. Osvaldo López Carrión, delegado del Poder Popular en ese territorio, le informó al autor de esta nota, que los directivos de la Empresa de Comercio y el Consejo Popular Malezas, ya realizaron una solicitud al Gobierno Provincial para conseguir el combustible que se necesita para el traslado del alimento.

Laura Rodríguez Valdés, residente en el barrio San Gil, le dijo a nuestra redacción, que la mayoría de sus vecinos coinciden en que los responsables del problema son los dirigentes del Gobierno Provincial y el Partido Comunista (PCC).

“Los cuadros del gobierno y el PCC sólo piensan en su bienestar personal y poco les importa si la población tiene algo para comer. Sus barrigas y el color rosado que poseen, es una prueba contundente de que no son parte de nuestro pueblo”, aseguró la señora Rodríguez Valdés.

Publicado originalmente en la edición 121 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Páginas Villareñas