logotipo ICLEP
Opinión
IMG
Sin medias tintas en el desarrollo local
Feb 25, 2023

Desde hace ya algunos años, el desarrollo local como forma de levantar la decadente economía del país ha sido un punto presente en cada discurso de la dictadura, pero a pesar de que esto es algo que se dice y redice, en la realidad no pasa más allá de la palabra y los planes de algunos dirigentes poco visionarios. Si bien no es menos cierto que parte de las grandes economías mundiales provienen del desarrollo local como pilar fundamental para el sustento familiar y social de las comunidades, e inclusive del país, en Cuba la economía de desarrollo local basada en los principios de la privatización de pequeñas y medianas empresas no avanza por culpa del propio régimen.

Desde las sombras dirige el enfoque de los emprendedores bajo sus propios intereses, poniéndoles frenos burocráticos y absurdos que para nada tienen que ver con el concepto de este tipo de mercado emergente. Uno de los problemas más frecuentes para la funcionabilidad de estos negocios que verdaderamente aportarían a la economía, es la persecución constante de actores vinculados a la dictadura que burocratizan y entorpecen el negocio privado, así como la inexistencia de mercados mayoristas para el abastecimiento de las materias primas a todas estas minindustrias.

Cabe reconocer que hoy la mayor parte de los servicios que necesita la población están siendo cubiertos por los particulares, quienes a pesar de todos estos contratiempos siguen importando todos los recursos de países como Panamá, Nicaragua o México, cubriendo así ese bache comercial creado por el propio régimen en sus mismos establecimientos. Pero desgraciadamente, mientras existan en este país personas que frenen el desarrollo local por temor al enriquecimiento de quien sí quiere trabajar, el sector privado nunca pasará de pequeñas y medianas empresas a grandes negocios que aporten a sus conciudadanos mejores condiciones de vida, empleos bien pagados e inclusive la tan añorada prosperidad que necesitan los cubanos.

Publicado originalmente en la edición 140 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Cimarrón de Mayabeque

 

 

IMG
Sigue faltando el aceite en la cocina cubana
Feb 24, 2023

El desabastecimiento de alimentos es un problema generalizado desde el occidente hasta el oriente del país, lo que genera cada día más indignación entre la población que, a pesar de contar con el dinero, la mayoría de las ocasiones no puede adquirir los productos que necesita. Esta escasez no solo se está viendo en las tiendas en moneda nacional, sino también en las de MLC (Moneda Libremente Convertible); mientras la dictadura apuesta por un plan de soberanía alimentaria, los pinareños buscan una forma de sortear la carestía diaria, pero la mayoría de las veces no la encuentran. El aceite, por ejemplo, en estos últimos días ha estado más escaso que nunca, aunque desde hace años viene presentando problemas.

La situación con este líquido graso hoy es crítica, ni siquiera el que la dictadura vende en las bodegas (250 ml por persona) ha llegado a las manos del pueblo, esto ha dado lugar nuevamente a que el precio de un litro de aceite oscile por los 1300 pesos, que es la mitad del salario de un trabajador. Este producto con el que sí cuenta el sector privado, ¿de dónde sale? A contrabando de los centros de la dictadura, acaparado hasta por los mismos directivos que se llevan la mayor parte del negocio, por eso nunca llega directamente al pueblo.

El abasto de aceite al mercado cubano pende del hilo de la capacidad de compra en el exterior, en otras palabras, del financiamiento con que se cuente. Cuba importa el refinado a granel para envasarlo en plantas ubicadas en La Habana y Camagüey, y compra también soja en grano para producirlo en la única fábrica del país que está en Santiago de Cuba; lo que quiere decir que la isla depende de los productos de otros países, no es capaz de buscar una solución para producir desde adentro, siempre como un parásito mientras el pueblo llora de tanta necesidad.

Publicado originalmente en la edición 249 del medio de comunicación comunitario del ICLEP,  Panorama Pinareño

IMG
¿Es la libertad un valor universal?
Feb 21, 2023

Estados Unidos se fundó sobre la premisa de que la libertad es un valor universal. Thomas Jefferson, en la Declaración de Independencia, fue inequívoco: “Sostenemos que estas verdades son evidentes: que todos los hombres son creados iguales; que están dotados por su Creador de ciertos derechos inalienables; que entre estos están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad”. Pero ¿realmente la libertad es valorada universalmente por todos los pueblos, en todas partes, en todo momento?

Históricamente, no se puede argumentar que la libertad es un valor universal. El profesor Jesse Rufus Fears, al dar una conferencia sobre la Historia de la Libertad, señala que la gran civilización egipcia que construyó las pirámides ni siquiera tenía una palabra para libertad en su vocabulario; China y Mesopotamia nunca desarrollaron una idea clara de libertad; y en China, las enseñanzas de Confucio se referían al orden y no a la libertad.

En condiciones de tensión, muchos pueblos han estado dispuestos a renunciar a sus libertades políticas e individuales para proteger a su nación de los ataques extranjeros. La Ley Patriota de EE. UU., que reducía las libertades individuales al ampliar los poderes de los organismos encargados de hacer cumplir la ley, fue promulgada por el Congreso tras los ataques del 11 de septiembre. La Ley Patriota es un ejemplo contemporáneo de una decisión nacional para disminuir la libertad.

Y, sin embargo, prácticamente todos los presidentes estadounidenses han articulado la política exterior estadounidense sobre la premisa de que la libertad es un valor universalmente deseado, y hemos librado varias guerras para defender el principio de la libertad universal. Pero, ¿qué sucede cuando los individuos de otras naciones no valoran la libertad como nosotros? ¿Deberían ser obligados a ser libres?

La libertad se define más fácilmente como tener la capacidad de actuar sin restricciones. La libertad está relacionada, pero no es idéntica al concepto de libertad. Ser libre es ser autodeterminante; tener libertad es estar liberado de algo. La libertad está asociada con las instituciones; la libertad es personal. Para mantener esta discusión alejada de debates filosóficos esotéricos sobre la libertad, estoy pensando aquí en la libertad en el contexto sociopolítico.

Y para enmarcar mejor la cuestión de si la libertad es un valor universal, tomemos prestado el desglose de la libertad del profesor Fears en tres componentes de libertad nacional, política e individual. La libertad nacional es la libertad de una nación para ser independiente del dominio o control extranjero. La libertad política es la libertad de elegir a nuestros propios funcionarios de gobierno, el derecho a decir lo que queremos en el discurso político y a darnos las leyes bajo las cuales seremos gobernados. La libertad individual es la libertad de vivir como elijamos, siempre y cuando no dañemos a nadie más.

Estas libertades no necesariamente se encuentran juntas. Por ejemplo, se puede decir que Corea del Norte o Cuba tienen libertad nacional, pero no libertad política o individual. El Imperio Romano se enorgullecía de sus libertades individuales, pero carecía de libertad nacional o política ya que todas las naciones que lo componían estaban gobernadas por Roma.

En los Estados Unidos hemos logrado una integración notable y equilibrada de la libertad nacional, política e individual. Pero de eso no se sigue que todas las naciones quieran nuestro tipo de libertad. Hemos encontrado nuestro acuerdo de libertad enormemente útil y beneficioso, y creo que es el mejor arreglo social que se ha ideado hasta ahora. Pero otras sociedades pueden necesitar encontrar formas de organizar sus naciones de manera que reflejen mejor sus propias tradiciones y cultura. A pesar de nuestras propias intenciones bien intencionadas, si la libertad no es un valor universal, debemos aceptar de mala gana la libertad de otros pueblos para definir su propia identidad.

Puede que la libertad no sea un valor universal, pero es duradero. En la primavera de 2019, visité Riga, Letonia, donde en 1818 el bulevar principal se llamó Alexander Street en honor al zar Alejandro. Cuando Letonia obtuvo su independencia por primera vez en 1923, el bulevar pasó a llamarse Freedom Street. Ese nombre provocativo no convenía a los ocupantes nazis durante la Segunda Guerra Mundial que la rebautizaron como Calle Adolf Hitler. Más tarde, cuando los soviéticos ocuparon Letonia, la rebautizaron como Calle Lenin. Pero cuando Letonia recuperó su independencia en 1990, el famoso bulevar, una vez más, se convirtió en Freedom Street. Que siempre permanezca libre.

 

El último libro del Dr. Azel es “Sobre la Libertad”

IMG
A propósito del VII Domingo del Tiempo Ordinario, Evangelio: Mateo 5, 38 – 48.
Feb 19, 2023

Hoy el Evangelio habla de actitudes aparentemente muy complicadas, cuando no imposibles: ofrecer la otra mejilla, ceder ante el que te presiona, amar a los enemigos… Necesitamos explicar algunas cosas.

Ningún ser humano tiene poder sobre lo que siente. Hay personas que nada más verlas te iluminan el alma, y hay personas que, nada más pensarlas, te hacen explotar el hígado y te llenan de bilis el torrente sanguíneo. Ni en un caso ni en el otro podemos hacer un cambio a voluntad. Sentimos lo que sentimos, y punto.

Por eso, Cristo no nos está pidiendo “sentir” amor, porque ante algunas personas de nuestra historia, eso puede que sea prácticamente imposible. Cristo nos pide vivir en actitud de amor, elegir las conductas del amor por encima de los deseos que puedan nacer del más legítimo dolor, de la ira, de la decepción…

¿Qué significa “vivir en actitud de amor”? En primer lugar, elegir tratar bien al otro, con independencia de lo que me haya hecho. Siempre puedo tratar al otro con respeto, con educación, con amabilidad.

Lo segundo, renunciar expresamente a todo tipo de venganza, de revancha, de desquite, incluso a esas frases irónicas estratégicamente colocadas en ciertos momentos que de un modo magistral ponen en evidencia al otro, lo humillan, lo ponen en ridículo, frases que son deliciosamente malsanas, pero no evangélicas. Esto es lo que significa “poner la otra mejilla”, dicho de otro modo: “yo no voy a responder a tu mal con otro mal, no voy a hacer lo mismo que tú, no voy a pagarte con la misma moneda, no voy a ser contigo como tú has sido conmigo”.

Y lo tercero, mantenerse disponible para hacer el bien al que nos ha hecho daño. No tengo por qué invitarte a mi fiesta, porque una fiesta no es imprescindible para la vida, pero si necesitas una medicina, si necesitas alimento, o ropa, o información, o colaboración, incluso una transfusión de sangre… aquí estoy, molesto, airado, decepcionado, lo que sea, pero aquí estoy. El Evangelio no me pide invitar a alguien que me ha herido a comer conmigo, pero sí a estar atento a que no se quede sin comer.

Y siempre es bueno aclarar que esto no es hipocresía, porque la hipocresía es un bien con cálculo, es un servicio que mira a una recompensa futura. Amar, en el sentido cristiano, es gratuito, es hacer el bien porque quiero elegir el bien, como hizo el Maestro.

Cristo, ante la traición de Judas, le respondió con dolor: “¿Con un beso entregas al Hijo del hombre?”, pero no le dijo: “Eres un mal nacido”. Sus discípulos lo abandonaron, pero después de la resurrección los reunió o les encargó la predicación del Evangelio. Pedro, lo negó. Antes de la negación, Jesús le hacía dicho que sería la cabeza del colegio apostólico; después de la negación, Jesús lo confirma en su puesto. Y durante su pasión no deja de escuchar, consolar, interceder, incluso justificar. Nunca deja que su dolor contamine su opción, la opción de vivir eligiendo hacer el bien.

Por eso siempre será posible ofrecer la otra mejilla y amar al enemigo, porque esto no depende de una emoción sino de una decisión: la decisión de no dejar que el mal recibido contamine mi libertad para tender mi mano adolorida o ensangrentada y decirte: “puedes contar conmigo”.

IMG
Cuba exige libertad para sus presos políticos
Feb 18, 2023

La noticia de la deportación de los 222 presos políticos nicaragüenses a los Estados Unidos, por parte del régimen de Daniel Ortega, este 9 de febrero, se recibió con cierta muestra de alegría y de dolor. Alegría, por cuanto su liberación de las cárceles significaba el fin de años de tortura y dolor. Por otro lado, embarga la tristeza, al ser deportados de su tierra natal, maniobra política bien diseñada por la dictadura en el poder, al modificar la Constitución del país incluyendo la famosa pérdida de la nacionalidad, usado como un recurso de este régimen de izquierda para eliminar la oposición política.

Para los cubanos la noticia ha sido como una luz de esperanza, sobre todo para los más de 1540 presos políticos que se hallan encarcelados por los sucesos del 11 de julio y las restantes manifestaciones que con posterioridad han conmovido a la Isla. Gobiernos, organismos internacionales defensores de los derechos humanos, fuerzas opositoras al régimen cubano y de la sociedad civil independiente, se han venido manifestando, por la liberación de los presos políticos cubanos, encarcelados únicamente por ejercer sus derechos ciudadanos de asociación, manifestación y libertad de expresión.

Cuba exige libertad para sus presos Las exigencias al régimen cubano han encontrado oídos sordos, motivado principalmente por el temor a quienes se han convertido en opositores abiertos y convencidos de la verdadera naturaleza del sistema, y a quienes liberar sería un peligro total para su estabilidad política. Y es que estos prisioneros del régimen han sido marcados por el amargo sabor del presidio, como bien dijera nuestro Martí: “...el dolor del presidio es el más rudo, el más devastador de los dolores, el que mata la inteligencia, y seca el alma y deja en ella huellas que no se borrarán jamás”. Y es precisamente ese dolor, el que los cubanos queremos que cese, que las puertas de las cárceles rompan sus cerrojos y que los inocentes salgan a las calles y a sus hogares. Así fue referido y comunicado a los representantes del régimen cubano, por el Cardenal Beniamino Stella, enviado del Papa Francisco, en el aula Magna de la Universidad de La Habana, al expresar: “El Papa desea mucho que haya una respuesta positiva (por parte del gobierno cubano).

Es importante que los jóvenes que en un momento manifestaron su pensamiento, de la forma que conocemos, puedan volver a sus casas”. Este es también el sentir de millones de cubanos, tanto de los que sufren condenas, de sus familiares, como de los buenos cubanos amantes de la justicia y la libertad. Queremos la liberación de nuestros presos.

Publicado originalmente en la edición 150 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Espirituano

 

IMG
Ser gobernados por persuasión o por fuerza
Feb 16, 2023

Margaret Thatcher, que fuera Primer Ministro del Reino Unido, destacó que “Europa fue creada por la historia, América por la filosofía”. Ciertamente, todos somos producto de la historia y actividad intelectual de nuestras comunidades. Es una historia que nos informa quiénes somos, y que cargamos a todas partes como nuestra mochila intelectual (digo mochila intelectual para evitar las connotaciones negativas asociadas a “bagaje intelectual”). Somos una porción de las comunidades de las que procedemos.

De haber sido colonizados por franceses o españoles nuestras dietas, lenguaje y formas de vida serían diferentes, y también nuestras formas de gobierno. Serían unos diferentes Estados Unidos de América. Estados Unidos es una nación de inmigrantes, y los inmigrantes traen con ellos concepciones adquiridas sobre sociedad y gobierno que enmarcan su enfoque de la vida en el escenario de su nuevo país.

En Estados Unidos nuestra mochila de tradición filosófica comienza con el arribo a Nueva Inglaterra de los Puritanos imbuidos de su doctrina calvinista. Esta doctrina religiosa es posteriormente conformada por la filosofía natural de la Ilustración del siglo 18. De esta tradición los Padres Fundadores derivaron sus conceptos de relación entre el estado y el individuo que son la piedra angular de la filosofía política americana.

Nuestra historia intelectual condiciona la forma en que vemos al mundo. En Estados Unidos es una historia intelectual de liberalismo clásico como filosofía política. Es decir, nuestra mochila intelectual contiene conceptos como la primacía del individuo, el consentimiento de los gobernados, la ambición racional, los derechos individuales emanando de la naturaleza (no del gobierno), gobierno limitado, e igualdad.

Nuestra mochila intelectual de liberalismo se llena con ideas del filósofo inglés John Locke (1632-1704), comúnmente definido como “Padre del Liberalismo”. Los conceptos de Locke de republicanismo y teoría liberal permean nuestros Documentos Fundacionales.

En contraste, las mochilas intelectuales de los españoles y portugueses colonizadores de Latinoamérica están más cercanamente asociadas con las ideas de otro filósofo inglés del siglo 17, Thomas Hobbes (1588-1679). A diferencia de Locke, Hobbes defendía el gobierno ilimitado y la autoridad absoluta del soberano. Para Hobbes, los ciudadanos valoran orden y seguridad por sobre todo; así desarrolla su versión de la teoría del contrato social en la cual entregamos nuestros derechos al estado a cambio del orden y seguridad que el estado puede proporcionar. Hasta la fecha, Locke es relativamente desconocido en Latinoamérica.

En otras palabras, las dos mochilas intelectuales pueden ser vistas como la representación de las dos formas de dominar según Platón: persuasión y fuerza. El modelo “lockeano” de gobierno confía en la persuasión para obtener el consentimiento de los gobernados, y funciona en el ámbito de un gobierno limitado. El “hobbesiano” depende de la fuerza para expresar el poder absoluto del Leviatán.

Hay mucho más en esta historia, por supuesto, pero ideas y acciones viven juntas y esos dos diferentes conjuntos de ideas han influenciado las estructuras de gobierno en nuestro continente: persuasión “lockeana” en Estados Unidos y Canadá, fuerza “hobbesiana” en Latinoamérica. Con relación al papel del gobierno en la sociedad, esas dos concepciones son asimétricas ideológicamente.

Han pasado siglos, pero vemos inconcientemente presente en la mochila intelectual latinoamericana actual esencialmente la noción “hobessiana” de gobierno ilimitado. Una idea de un contrato social que favorece el colectivismo sobre la primacía de los derechos individuales. Es muy fácil discernirlo examinando las expectativas generales que los latinoamericanos tienen del rol del gobierno en la sociedad.

Los eventos no ocurren en un vacío intelectual, y con el tiempo llevamos nuestras mochilas intelectuales “lockeana” y “hobbesiana” a formas más limitadas o ilimitadas de gobierno representadas en el sistema político americano. Pero también con el tiempo nuestra herencia intelectual “lockeana” de gobierno limitado deviene más y más diluida, no por la inmigración, sino por nuestro fracaso en articular y explicar conceptos “lockeanos” de persuasión sobre fuerza.

Somos, y debemos continuar siendo, una nación de bienvenida. Y consecuentemente debemos encontrar formas de recargar nuestras mochilas intelectuales con la filosofía “lockeana” de gobierno limitado, antes que nos veamos gobernados por la fuerza.

El último libro del Dr. Azel es “Sobre la Libertad”

 

IMG
La saga de dos globos: uno chino y otro americano
Feb 15, 2023

Hay momentos en nuestra vida en que aunque nos embargue el miedo los hombres tenemos que ponernos los pantalones. Si no lo hacemos nos convertimos en el hazmerreír de la humanidad. Ese fue el caso la semana pasada entre el malévolo globo comunista chino y el globo desinflado que tenemos en la Casa Blanca. Los acontecimientos han sido manipulados de tal manera que será muy difícil encontrar la verdad envuelta en tanta mentira a ambos lados del Océano Pacífico. De todas maneras voy a tratar de hacerlo.

Lo primero que debió de haber ocurrido fue la destitución inmediata del Secretario de Defensa, Lloyd Austin, y del Jefe del Estado Mayor Conjunto, Gen. Mark Milley, por haber faltado a su obligación de informar a tiempo a su jefe el presidente de los Estados Unidos. Lo segundo que Joe Biden—en su responsabilidad de velar por la seguridad nacional—ordenara la destrucción expedita del artefacto que sobrevolaba sobre el territorio nacional. Pero eso no pasó porque Biden tiene miedo al chantaje de Xi Jinping con respecto a los negocios sucios que ha hecho Hunter Biden en China Comunista.

La primera reacción del cobarde de Biden fue de no derribarlo para no molestar a Xi Jinping. Nadie en el gobierno sabía qué hacer con el globo chino. Después de marchas para adelante y marchas para atrás la presión de la opinión pública los obligó a tomar acción. La momia quiere mantenerse vigente para ser candidato en las elecciones de 2024. El propio Biden, declaró a los medios que lo acompañan y protegen que el globo había sido derribado por órdenes suyas el pasado miércoles.

Los chinos, por su parte, son taimados y saben mentir como lo demostraron con la pandemia del Covid 19. Afirmaron que el globo era una “nave civil” que estaba siendo utilizada con fines meteorológicos y que se había desviado de su ruta. De todas maneras, según Fox News, cuando el globo había dejado atrás las costas de Carolina del Sur en la tarde del sábado fue derribado por un avión militar F-22 cuando se encontraba a 58,000 pies de altura con un misil A-9X. Como resultado del incidente del globo, el Secretario de Estado, Anthony Blinken, canceló su programado viaje a China Comunista en los próximos días.

Por otra parte, las naves de espionaje son una cuestión común y yo no tengo duda alguna de que, en este mismo momento, hay muchos satélites americanos que vigilan numerosas bases militares chinas. Pero ninguno de ellos es visible al ojo humano.

Lo que llama la atención es que este globo de espionaje haya sido desplegado de tal manera que pudiera ser visto por el ojo humano. Un reto público cuyo objetivo es determinar si los Estados Unidos permiten o no la violación descarada de su espacio aéreo. Algo así como el niño a quien le mojan la oreja en la escuela para ver si es valiente o cobarde. Es además, un regreso a la década de 1960 cuando los Estados Unidos y la Unión Soviética se encontraban enfrascados en la Guerra Fría y el avión U-2 piloteado por Gary Powers fue derribado por órdenes de Nikita Khrushchev.

Volviendo al presente, los manejadores de Joe Biden trataron de amortiguar el impacto publicitario negativo sobre el presidente afirmando que durante la administración de Donald Trump también habían aparecido globos chinos en los cielos americanos. Pero, como todo lo que dice esta gentuza, esto es una soberana mentira. ¿Cómo es posible que esto haya ocurrido y que ni Trump ni ninguno de sus asesores hayan sido notificados? Todos ellos lo han negado y yo los creo.

En cuanto a lo que ha motivado este reto a los Estados Unidos no tengo que ir muy lejos para explicármelo. Los chinos se han atrevido porque saben que Joe Biden es débil, es corrupto y anda por otra galaxia. No es un presidente con pantalones como muchos de sus antecesores que han  confrontado con la fuerza los retos al imperio americano. Esta conducta enérgica comenzó a mediados del Siglo XIX con la política conocida como “Diplomacia de la Cañonera” cuando algunas  potencias europeas trataron de convertir en colonias a varias naciones de América Latina. Washington las paró en seco y se acabó el problema.

Cuando finalizaba la Guerra de Independencia de Cuba, en 1898, Teddy Roosevelt—al frente de sus Rough Riders—le  puso el último clavo al ataúd español tomando la Loma de San Juan y exclamando que aquel había sido el “día más feliz de mi vida”. Nunca les pidió permiso a los españoles para contribuir a la consolidación de la libertad de Cuba.

Seis años más tarde, en 1904, ya Teddy Roosevelt era presidente. El 18 de mayo, un hombre de negocios americano fue secuestrado por elementos cercanos al gobierno de Marruecos que pidieron una suma de dinero para ponerlo en libertad. Teddy les exigió que lo soltaran y, cuando no lo hicieron, les mandó unos cuantos barcos de guerra. El americano fue puesto en libertad sin que se pagara rescate alguno.

En 1965, Juan Bosch—un comunista que había vivido en la Cuba de Castro—fue electo presidente de la República Dominicana y empezó el proceso de establecer un régimen similar al de La Habana. Lyndon Johnson invadió a la República Dominicana con 40,000 soldados y restableció la democracia. Algunos dominicanos resienten aquella invasión americana pero, sin ella, es muy probable que hubieran corrido la misma suerte de nosotros los cubanos, más de seis décadas de peregrinaje, añoranza y orfandad de patria.

En octubre de 1983, el Primer Ministro de Granada, Maurice Bishop, viajó a Cuba Comunista y se preparaba a establecer un régimen similar en su isla. El entonces Presidente americano, Ronald Reagan, decidió que no podía haber otra Cuba en el hemisferio. Invadió la isla, destituyó a Bishop y puso a correr al jefe de los cubanos, el Comandante Pedro Tortoló. “Muerto el perro se acabó la rabia.”

En 1989, el General Manuel Antonio Noriega, había convertido a Panamá en el centro de distribución de drogas destinadas a los Estados Unidos. El entonces presidente americano, George H. W. Bush, decidió atacar el tronco y ordenó el derrocamiento y captura de Noriega. El repulsivo personaje fue a parar en una prisión americana.

Xi Jinping y sus apandillados están determinados a sustituir a los Estados  Unidos como la primera potencia del mundo. Para ello, tienen que destruir a este país y avanzan en ese empeño. A quienes disfrutamos de la libertad y la prosperidad de esta nación excepcional nos corresponde defenderla y confrontar ese reto. Si no lo hacemos pagaremos el alto precio de la miseria y de la esclavitud. Para ello, tenemos que neutralizar la astucia del globo chino e inyectarle testosterona al globo americano. No hay tiempo que perder porque tenemos la soga al cuello.

IMG
Destierro hacia Estados Unidos: ¿Jugada cantada del régimen con los presos políticos?
Feb 14, 2023

Me enteré de la más reciente maniobra del régimen dictatorial nicaragüense de Daniel Ortega a través de la emisora chavista TeleSur. Ese medio de agitación y propaganda del “socialismo del Siglo XXI” es, aparte de la no menos manipuladora y mendaz RT en Español —portavoz de otra dictadura impresentable: la de Putin en Rusia—, el único que goza en nuestra Patria del discutible privilegio de contar con un canal para airear al público cubano sus manipulaciones, medias verdades y mentiras.

En la pantalla aparecía la imagen del anciano mandamás de la patria de Rubén Darío. Lo flanqueaba su heredera y esposa Rosario Murillo. El espectáculo, de por sí desagradable, se completaba con la voz del dictador, que se repetía una y otra vez, y con uno de esos titulares tendenciosos y repulsivos que suelen obsequiarnos las emisoras rojas.

Ortega, en pose prepotente, mencionaba uno tras otro los nombres de los presos de conciencia que su régimen acababa de deportar a Estados Unidos, al tiempo que, en relación con cada uno de ellos, afirmaba que había ascendido al avión de manera tranquila. El titular de TeleSur era francamente asqueante: el término empleado para caracterizar a los aludidos era el de “traidores”.

El diario castrista Granma también se hace eco del sucedido, y lo hace afirmando que los 222 deportados habían sido sancionados por “diversos actos ilegales, entre ellos incitar a la violencia, al terrorismo y a la desestabilización económica”. Por ende, se emplean también, en el caso de “la hermana Nicaragua”, los enfoques que en casos análogos han primado en la misma Cuba, donde se afirma que los hombres y mujeres del 11 de Julio —y también los demás— están presos no por haber expresado pacíficamente su inconformidad con el régimen, sino por la supuesta comisión de delitos contra la propiedad y la tranquilidad pública.

En el seno de la prensa independiente cubana, de la noticia se ha hecho eco, con notable acierto, Yoani Sánchez. La talentosa colega, en un comentario publicado en 14yMedio, así como en su “cafecito informativo” de este viernes, recuerda que el método de “apresar, condenar y canjear” es “la táctica de los autoritarismos contra los disidentes”.

En ese contexto, la también bloguera califica al dictador Daniel Ortega de “fiel discípulo de Fidel Castro”, y recuerda la jugarreta similar hecha por el fundador de la dinastía antillana con ocasión de los cautivos del Grupo de los 75. Pasando a la Cuba de hoy, Yoani recuerda a los más de 1 000 presos de conciencia con que contamos y especula: “Miguel Díaz-Canel debe sentir que tiene suficiente baza para obtener suculentos beneficios con ellos”.

Abundando en el tema, la colega Sánchez afirma: “Las señales de que una jugada de canje se coordina tras bambalinas no podrían ser más evidentes”. Entre esas indicaciones, ella alude a los comentarios de funcionarios de Estados Unidos que “han advertido recientemente que los presos de conciencia son un obstáculo para la normalización de relaciones entre ambos países”. También menciona las instancias del cardenal Beniamino Stella, enviado especial del Papa, para que ellos sean liberados.

En su podcast, la bloguera insiste en el asunto, aunque señala no creer que sea el momento adecuado para que los continuadores del castrismo hagan una jugarreta similar. Entre las razones que invoca para esto, la directora del diario digital menciona el número notable de esos inconformes (quienes, debido a su gran número, no cabrían en un avión); también señala que el canje, ahora, sería por “migajas”. Como conclusión de su análisis, la colega indica con acierto que los plazos “de gracia” que en la actualidad puede conseguir el castrismo con maniobras de ese tipo son más breves.

Pero a esos argumentos de Yoani yo agregaría uno más, y nada desdeñable: ahora mismo, en esta Cubita bella de antaño (que los comunistas han transformado en una sucursal terráquea del Infierno) son montones los ciudadanos de a pie que pagarían gustosos varios años de encierro (aunque los padezcan en las dantescas cárceles políticas del castrismo) con tal de lograr emigrar a Estados Unidos.

¡No digo yo al gran país del Norte! ¡Si ahora mismo hay cientos de miles de compatriotas nuestros que, abrumados por la calamitosa situación que sufren en su país, se montarían sin pensarlo dos veces en cualquier medio de transporte que los lleve a Haití, Mongolia o Ruanda! ¡O a la mismísima Cochinchina!

En ese contexto, un avión (o una flotilla de ellos) que transportase a Miami a los presos de conciencia del 11 de Julio o de otras fechas, equivaldría a una invitación —¡hecha desde el habanero “Palacio de la Revolución”!— a que los cubanos desesperados se lancen a calles y plazas a manifestarse en contra del régimen que abominan.

Si fueron decenas de miles durante el Gran Alzamiento Nacional Anticomunista del 11 de julio de 2021 , ahora cabría esperar que fuesen cientos de miles o —¿quién sabe!— quizás millones… Los castristas de “la Continuidad” son lo bastante torpes para seguir insistiendo en las mismas recetas económicas trasnochadas que han metido a Cuba en la bancarrota de hoy, pero creo que son lo bastante matreros para no ponerse —¡a estas alturas del juego!— a “cuquear” a sus súbditos desesperados con perspectivas tan halagüeñas como esas.

Parece que la dinastía dictatorial nicaragüense —marido y mujer— hasta el momento no ha logrado arruinar a su país como lo han hecho sus camaradas de la Gran Antilla. Por eso pueden darse lujos como el de deportar a sus opositores a Estados Unidos. ¡Pero los de Cuba, ni pensarlo!

 

Cortesía CubaNet