Desde el pasado 23 de mayo Pinar del Río habilitó la venta de combustible al sector particular a través de la plataforma Ticket, medida que la dictadura encontró para suavizar los efectos de la intensa crisis que enfrenta la provincia con respecto al combustible.

Esta nueva modalidad fue afirmada por el medio local El Guerrillero, sin embargo, tres días antes los clientes podían acceder a ella e iniciar la cola en la sala de espera de manera virtual. No es tan fácil como la dictadura hace ver, para ellos todo lo que inventan es satisfactorio, pero cuando el pueblo va a la práctica sólo encuentra peros y contratiempos.

Esta vía requiere que el cliente se registre con un correo electrónico, se suscriba a uno de los planes de Ticket para acceder a los servicios y posteriormente, el listado con el que recibieron el turno se publicará en los CUPET a las 2:00 de la tarde y la persona tendrá derecho a la compra a partir de las 8:00 de la mañana del siguiente día y en un plazo de 24 horas.

Aunque la dictadura busque con esta medida eliminar un poco las colas en los servicentros de la provincia, la población deberá integrar una intensa lista de forma virtual y esperar a ser elegido para poder alcanzar solamente 20 litros de gasolina los dueños de carros y 10 los de motos.

A la vista todo parece estar mejor, pero en realidad la situación sigue de la misma forma o peor. Las personas se deben presentar a la gasolinera con el Carnet de Identidad, circulación del vehículo y los datos que deben corresponder con el registro de la plataforma electrónica para poder comprar, pero desde que comenzó esta nueva forma de compra la población se queja más pues no está segura de la forma en que se maneja esta nueva aplicación, escuchándose sólo comentarios negativos tanto en las calles como en las redes sociales.

Muchas personas no han podido comprar desde que se inscribieron y temen no poder hacerlo, lo que demuestra lo poco factible que es este invento de la dictadura.

Publicado originalmente en la edición 257 del medio de comunicación comunitario del ICLEP,  Panorama Pinareño