Matanzas, Cuba- El opositor y ex preso político José Oscar Sánchez Madan fue arrestado ayer por caminar pacíficamente por las calles de Matanzas mostrando carteles con exigencias ciudadanas. Es la segunda detención que le practican en menos de 48 horas por la misma causa.

Como había comunicado a la Seguridad del Estado en el anterior arresto, Sánchez Madan volvió a salir a la calle como protesta porque la policía política presiona a los dueños de negocios particulares con los que trabaja para que lo expulsen. Esta vez llevaba en cada mano carteles en los que se leía “Cuba necesita mejores gobernantes” y “Necesitamos precios más bajos y los salarios más altos”.

Salió a las 11 a.m. de la Terminal de Ómnibus Nacionales y se incorporó a la Calzada de Tirry, donde fue golpeado por un ex miembro de las tropas especiales del ejército cubano, de nombre Yoel García Rego. El opositor comenzó a gritar “Abajo Fidel”, “Abajo el comunismo”, lo que provocó que el agresor se alejara, según información publicada por el Foro Antitotalitario Unido (FANTU), organización de la cual Sánchez Madan es Coordinador Político.

Luego de avanzar varias cuadras, fue detenido en el puente Calixto García, conocido como Puente de Hierro, por tres oficiales de la Seguridad del Estado que lo condujeron al cuartel de bomberos ubicado muy cerca de ese lugar. De allí fue trasladado en una patrulla hacia la estación policial de La Playa, la misma donde fue interrogado dos días atrás.

Allí se repitió la dinámica de la detención anterior: interrogatorio dirigido por un teniente coronel, amenazas de volver a prisión por el delito de desórdenes públicos e imposición de un acta de advertencia que nuevamente se negó a firmar. Fue llevado a un calabozo a las 5 p.m. donde lo mantuvieron hasta las 2 de la madrugada, cuando fue liberado.

Desde que cumplió se segunda política hace unos meses, Sánchez Madan ha sido víctima de múltiples atropellos, varios de ellos por ejercer su derecho a la libertad de expresión. A pesar de su avanzada edad y de que se encuentra en situación de calle, se ha visto obligado a recurrir a la huelga de hambre y ahora a la protesta pacífica con carteles para exigir a la Seguridad del Estado que deje de boicotearle los empleos en negocios particulares que logra conseguir para ganarse el sustento.