Artemisa, Cuba - “La ginecóloga me habló claro, me dijo que podía operarme, pero debía conseguir por la calle desde el bisturí hasta las agujas, el hilo y las pinzas”, denunció este martes la joven encinta y a término Aniubis Morejón Alvízar.

Morejón Alvízar, quien tiene fecha de parto para los últimos días de agosto y precisa de una operación de ligadura de trompas, manifestó a este medio sentirse sorprendida porque “no sabía que el desastre sanitario del país fuera de tal magnitud”.

Junto con el kit quirúrgico también se le exigió comprar en el mercado negro el material gastable, es decir, torundas, apósitos de gasa, guantes, esparadrapo, troquel, sonda vesical, etc. “Faltó poco para que me pidieran la anestesia”, añadió Aniubis.

La joven artemiseña, que con 33 años está próxima a concluir el periodo de menor riesgo para embarazos (35 años) y ya cuenta con tres hijos, solicitó a parientes que residen en Estados Unidos el kit quirúrgico y demás materiales.

Gladis Ortega López, enfermera que labora en el hospital Ciro Redondo, declaró a esta publicación que el centro atraviesa por grandes carencias. “La situación sobre la falta de insumos para tratar a los pacientes es real, en el hospital no hay nada”.

La hija de la artemiseña Carmen Rivalta Yanes tuvo que comprar de manera urgente en el mercado informal bisturí y todos los insumos quirúrgicos necesarios, valorados en 960 pesos, ante una apendicitis de última hora de su madre.

Publicado originalmente en la edición 174 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa.