Artemisa, 2 de noviembre, (ICLEP). El huerto, conocido como organopónico de la calle Central, volvió a mostrar actividad desde la última semana de octubre, después de múltiples publicaciones en redes sociales y medios independientes, donde se expuso a la luz el abandono del lugar.

La parcela, localizada con más precisión entre las calles 8 y10, y que había sido considerada perdida a causa del desánimo del régimen y de la alta densidad de hierbas, fue limpiado y más tarde roturado por un grupo de personas a disposición del gobierno. Hoy se encuentra sembrado con varios cultivos, fundamentalmente hortalizas. Se espera, son los pronósticos divulgados por las autoridades y que circulan de boca en boca, que para finales de año al menos la lechuga esté en producción.

Regla Montero Puig, artemiseña con residencia en la calle Central, a menos de dos cuadras del huerto, dijo a reporteros de Majadero de Artemisa que la causa del abandono comenzó cuando la gente que había puesto el gobierno “un buen día levantaron la pata y se perdieron”, quedando el lugar en manos de nadie.

“Por supuesto, eso ocurrió después que vendieron la última cosecha. Según lo que se dice no sólo hubo falta de semillas e insumos, sino desacuerdo entre los que trabajaban la tierra y el gobierno. Esa gente [el régimen] querían cada día cobrar más y más de impuestos. Al final no se sembró y el pueblo fue el perjudicado”, agregó Montero Puig.

Osvel Alcántara Toirac, jubilado domiciliado en la calle Martí, opinó al boletín que los artemiseños no comprendían cómo el régimen se podía dar el lujo de abandonar la parcela, en medio de una terrible crisis de ofertas de alimentos.

“Si no llega a ser por las denuncias esto todavía estuviera perdido. Hay que denunciar y denunciar”, añadió. De acuerdo con Ariel Falcón Palmero, uno de los nuevos empleados del organopónico, no sólo se trata de recuperar el huerto de la calle Central, sino de irlos recuperando todos.

Publicado originalmente en la edición 204 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa