Carlos Michael Morales tras su huelga de hambre. Foto: Facebook / Yoaxis Marcheco Suárez
Por ICLEP
Jul 23, 2024 | 4:00 PM
El régimen cubano condenó al periodista independiente Carlos Michael Morales a ocho meses de prisión domiciliaria durante el juicio llevado a cabo en su contra el 22 de julio en el Tribunal Provincial de Villa Clara.
El juicio estaba previsto para el pasado 19 de julio, pero tuvo que ser pospuesto para el lunes debido al considerable deterioro de la salud de Carlos Michael, que la pasada semana depuso la huelga de hambre que mantuvo durante 27 días.
Según la información obtenida por el medio ADN Cuba, el juicio en contra del periodista, en el que lo acusaron de desobediencia, “se extendió por varias horas y estuvo amañado, pero la abogada del reportero realizó un gran trabajo”.
Varios activistas y hermanos de lucha de Carlos Michael Morales difundieron en redes sociales las imágenes del deplorable estado físico y de salud en que se encuentra el periodista tras su huelga de hambre.
Carlos Michael Morales fue liberado en marzo de este año luego de cumplir una sentencia de dos años y 10 meses por cubrir las protestas del 11 de julio de 2021, pero el 4 de mayo al acudir a una citación de la Seguridad del Estado lo dejaron detenido bajo acusaciones de “desobediencia” por su actividad periodística que no había cesado al salir de la cárcel.
En junio, el periodista se declaró en huelga de hambre para exigir su inmediata liberación y días después tuvo que ser internado en la sala para penados del Hospital Provincial Clínico Quirúrgico “Arnaldo Milián Castro” de Villa Clara por su delicado estado de salud.
Incluso en esas condiciones las autoridades judiciales le negaron el recurso Habeas Corpus y fijaron una fecha para el juicio a sabiendas de que no estaba en condiciones para presentarse.
El 19 de julio, otro periodista independiente Omar Suárez Campos, fue agredido físicamente dentro de su vivienda por fuerzas de la brigada especial bajo las órdenes de la Seguridad del Estado, luego de una protesta pacífica para exigir sus derechos, entre ellos el acceso a medicamentos.
Suárez Campos relató a ICLEP que había ido a la farmacia a buscar el medicamento que toma regularmente, parkisonil, un fármaco controlado que llega a las farmacias a nombre de los pacientes específicos que lo toman bajo prescripción médica, pero le dijeron que se lo habían vendido a otras personas. Cuando el periodista fue al policlínico Raúl Sánchez a hacer su reclamo, le dijeron que efectivamente se trataba de una violación.
Indignado con esta situación, Omar hizo público su reclamo en la Avenida Alameda de esa ciudad gritando de forma pacífica consignas en contra del régimen como “Abajo el Comunismo” y “Abajo Díaz-Canel”, y portando un cartel con la frase "¿Dónde están mis derechos?", hasta que la policía lo condujo hasta su casa.
Una vez en su vivienda, comenzaron a llegar tres patrullas de la policía, otros vehículos con oficiales de la Seguridad del Estado y una ambulancia. Omar se negó a salir de su casa y les exigió que no entraran a su propiedad, pero llamaron a la brigada especial para que entrara a la vivienda a sacarlo.
"Dentro de mi propia casa fui golpeado, me sacaron aturdido de mi casa sin conocimiento, una muela me la sacaron, golpes en la espalda que no puedo respirar bien por ese pulmón izquierdo, el tobillo izquierdo lo tengo fracturado, otros golpes en otros lugares, un esgince en la muñeca derecha", detalló Omar y añadió que lo llevaron hasta el hospital León Cuervo Rubio de Pinar del Río en contra de su voluntad.
Omar envió al ICLEP las fotos de las lesiones que le hicieron con puños, patadas y tonfas y añadió que además de las agresiones físicas, provocaron daños materiales dentro de su vivienda: "Acabaron absolutamente conmigo y suerte que no me llegaron a matar porque no les convenía porque vieron que la calle se puso rebelde, muchas personas protestando que eso era un abuso, que era un atropello, que basta ya, eso lo vio todo el mundo".
Fotos de las lesiones enviadas a ICLEP por Omar Suárez Campos
En junio último, Omar Suárez Campos fue internado durante varios días en contra de su voluntad en el hospital psiquiátrico Isidro de Armas de Pinar del Río por sus constantes quejas ante la falta de agua en su provincia, por las que también fue amenazado.