Sancti Spíritus, Cuba, (ICLEP). La población espirituana se muestra alarmada por los altos precios que han alcanzado los medicamentos en el mercado negro. El alza incontrolable de los precios de los medicamentos que se comercializan en las redes sociales y por vendedores callejeros, se han triplicado en las últimas semanas, provocando inquietud en la población necesitada de ellos.

Un paquete de Alprazolam, antidepresivo de alto consumo cuesta 300 pesos el blíster, una tirilla de Enalapril 250 pesos, una de Ketoconazol 650 pesos, un ciclo de Rocephin, antibiótico de uso hospitalario cuesta entre 9 mil y 10 mil pesos, el salario de casi cuatro meses de un obrero.

La falta de medicamentos en las farmacias locales y esta creciente alza de sus precios en el mercado informal, donde único pueden adquirirse, hacen imposible para muchos espirituanos comprar los medicamentos que requieren para sus tratamientos.

"Ya no sé qué hacer con la falta de medicamentos. Como voy a mantener medicada a mi mamá, que requiere el Ketoconazol para un tratamiento de hongos en la piel y este cuesta 650 pesos", aseguró Irma Rivera, residente en el reparto Kilo 12.

Otra de las preocupaciones de los espirituanos, no es solo los altos precios de estos fármacos, sino el hecho de que muchos de los que se venden son de producción nacional y hoy no entran a las farmacias locales.

"No entiendo como el Enalapril no entra a las farmacias desde hace más de tres meses y se vende en el mercado negro, y es de producción nacional", aseguró Demetrio Cáceres, residente en La Rotonda. Eglis Damaso, trabajadora de la Dirección Provincial de Farmacias y Ópticas, aseguró al medio que varios de los medicamentos vendidos en el mercado informal, son de producción nacional, y parece que son el resultado de malos procedimientos y actos de corrupción.

Mientras que el Ministerio de Salud Pública se justifica alegando la falta de materias primas para garantizar la producción de medicamentos, el pueblo paga altos precios por medicamentos nacionales, que son desviados de la industria farmacéutica.

Publicado originalmente en la edición 174 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Espirituano