Foto de Mehmet Turgut Kirkgoz en Pexels
Por la periodista ciudadana Luisa Naría Bermudez
Jul 17, 2024 | 2:00 PM
Sancti Spiritus, Cuba, (ICLEP). Un panorama desolador se observa en las calles de Sancti Spíritus, donde personas con enfermedades mentales deambulan sin rumbo fijo, en busca de un apoyo que, hasta ahora, no ha llegado. Estos individuos, vulnerables y desamparados, esperan en vano la atención y ayuda que les corresponde por parte de las autoridades de Salud y de la Dirección Municipal de Seguridad Social.
La presencia de estos enfermos mentales, en su mayoría personas mayores de edad, en las calles y espacios públicos de la ciudad buscando alimentos en los centros gastronómicos y tanques de basura, es una realidad que preocupa a la población local, quien ve con dudas las supuestas garantías que dicen tener los ancianos en la provincia.
La mayoría de estos casos suelen ser personas que no tienen familiares allegados que se hagan cargo de ellos, por lo que la necesidad de ser atendidos por la seguridad social, se convierte para ellos en una obligación de vida o muerte.
"Donde quiera que vayas te encuentras con personas con problemas mentales, quienes se pasan el día buscando qué comer o esperando la ayuda de alguien y da pena ver cómo andan, muchos casi desnudos. Las autoridades de esta provinciadeberían de hacer algo al respecto, pues da vergüenza que eso suceda en una de las provincias que mayor número de personas viejas tiene", aseguró Claribel Montes Veloso, residente en la calle Manuelico Díaz.
Uno de los referidos casos, que preocupa a los vecinos del reparto Kilo 12, es la presencia en esta zona de uno de este enfermo apodado el Macao, quien permanece sin pantalones, desnudas sus partes, buscando comida en los tanques, en una zona de mucha presencia de niños.
Pese a las llamadas de alerta a la policía, esta no hace nada. En confesiones al medio Iraima Cardoso Borrego, trabajadora de la Dirección Municipal de Seguridad Social, expresó, que se conoce el problema, pero no hay recursos para ayudarlos, ni camas disponibles en el Hospital Psiquiátrico de Cabaiguán, para internar a los casos más difíciles.
Publicado originalmente en la edición 184 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Espirituano