Artemisa, Cuba, (ICLEP).. Opinan familiares y afectos de fallecidos que el mal servicio de la florería estatal Las Dalias se distingue por adicionar sufrimiento al que ya padecen las personas que han perdido un ser querido, debido a la incompetencia e incumplimiento habitual cuando se encarga la elaboración de coronas fúnebres.

Por solo citar el ejemplo más común, este jueves el establecimiento, localizado en la calle 29, interrumpió la confección de coronas para tres difuntos que estaban tendidos en la funeraria no solo por falta de flores, sino que más tarde se supo de otros desajustes organizativos.

La solución a mano de los dolientes recayó en acudir a los sitios particulares, que, aunque en ellos no se confeccionan coronas mortuorias, al menos se dispone de ciertas cantidades de flores para colocar encima del ataúd del ser querido. En contraste al recurso anterior, para los artemiseños que este jueves no estaban en condiciones de costear el tributo a sus seres queridos en los costosos sitios privados, el difunto partió hacia el camposanto sin al menos una flor.

“Mi padre se fue sin una flor. Estamos a mediados de mes y falta mucho para cobrar la miseria que cobro como maestra de una escuela primaria. No, Las Dalias es un desastre, como todo lo de este país. Pudieron buscar flores en el jardín estatal, pero el empleado encargado se enfermó y no pudieron mandar a otro. Es lo que se supo”, declaró a los corresponsales Mercedes Blanco Martínez, vecina de la calle República.

Maritza López Batista, empleada de Las Dalia, dijo a los reporteros: “La verdad es que hay mucha presión con las flores. No solo son los fallecidos, sino también las que se necesitan para los actos políticos. El jardín que tenemos no da abasto para tanta demanda”.

Publicado originalmente en la edición 225 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa