Artemisa, Cuba, (ICLEP). Residentes en el reparto Toledo se mostraron en desacuerdo, de modo masivo, con la decisión de las autoridades de dar por finalizada la venta de viandas en la comunidad. El local será destinado a otras funciones.

El fin de este punto de comercialización, decisión considerada por los vecinos como arbitraria, obliga a las personas, incluyendo al sector etario de la tercera edad, a trasladarse desde el reparto Toledo hasta La Plaza, distante a cuatro kilómetros. Llegar al centro de la ciudad, a donde el mercado La Plaza, implica gastos adicionales a causa del importe del pasaje en coches tirados por caballos.

Esto agrega otra cuota de sacrificio a los residentes en dicha comunidad. El disgusto en el reparto es generalizado. Las autoridades tomaron esta decisión para ubicar en el mismo lugar un punto de venta de gas licuado para cocción. Pero, igualmente, el sitio se mantiene cerrado:

“Casi nunca hay gas”, dijo al boletín la anciana Alicia Martínez Ramos, residente en Toledo. Joaquín Bravo Espinosa, delegado de barrio del Poder Popular de la zona 1 del reparto, dijo a los comunicadores que la decisión se tomó en el Gobierno local. “Aunque la gente de aquí también estaban pidiendo un local para la venta de gas”, añadió el delegado.

Publicado originalmente en la edición 220 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa