Pinar del Río, Cuba - Decenas de toneladas de tabaco empacado fueron afectadas por las lluvias del huracán Ian echándolas a perder mientras la dictadura mintió en el noticiero diciendo que las afectaciones fueron ínfimas.

Solo en el municipio pinareños alrededor de seis de los ocho almacenes principales de tabaco fueron afectados totalmente comprometiendo la calidad de la hoja al no estar cubierta por mantas como debía haber sido.

Tras el paso de Ian por suelo pinareño, los almacenes de la carretera a viñales, donde se encontraban tres de los más grandes de la provincia fuero totalmente afectados quedando solo con afectaciones parciales dos en el resto del municipio donde el volumen de tabaco almacenado era inferior a los que recibieron daños severos.

Al respecto el medio intentó entrevistar a la administradora Margoth Rivero, jefa de la casa de acopio y despalillo de tabaco Niñita Valdés sobre los daños ocasionados en el centro a la hoja acopiada, pero esta se negó a ofrecer declaraciones ya que refirió que “esto no es problema de ustedes” y añadió que “además, tampoco puedo hablar al respecto”, confirmando así que la dictadura previamente prohibió a los dirigentes y funcionarios de la empresa de tabaco comentar sobre los verdaderos daños ocasionados.

Por otro lado, las afectaciones a las casas de curado del campesinado tabacalero pinareño fueron críticas, perdiéndose por esta parte varias toneladas más de la hoja.

Los principales daños al tabaco fueron causados en el municipio cabecera de Pinar del Río, en San Luis y en San Juan, siendo estos dos últimos municipios los más perjudicados, pues para esa fecha aún la dictadura no había recolectado todo el tabaco de las casas de curado que fueron afectadas.

Sobre esto, el campesino pinareño Roberto Acosta Fundora declaró que “a nosotros no nos dieron nada para resguardar el tabaco, ni una lona, ni una manta, nada, pero tampoco lo recogieron a tiempo”. Según el campesino, la empresa de tabaco no se hará cargo de los daños ocasionados a la hoja que aún permanecía en las casas de curado pues expusieron a los campesinos que “si el tabaco no está en nuestros almacenes, la responsabilidad es de ustedes”, generando así un gran descontento entre los afectados que no podrán cobrar por el fruto de su trabajo.

Publicado originalmente en la edición 242 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Panorama Pinareño.