LA Habana, Cuba - Cuatro nuevos represores violentos fueron identificados en un programa de la Fundación para los Derechos Humanos en Cuba (FDHC) y el Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH).

“Represores Cubanos” mostró los rostros del colaborador de la Seguridad del Estado Irán Septiem Suárez, de la capitana Amparo Álvarez, del primer suboficial Jorge Pedroza Machado y del primer teniente Ernesto Plácido Ibáñez.

De acuerdo con Diario de Cuba, en la página web del programa se informó que Septiem Suárez es miembro del Partido Comunista de Cuba (PCC) y que, presuntamente, ha participado en actos de repudio contra opositores y Damas de Blanco en el municipio matancero de Colón.

Por ejemplo, revelaron que a la Dama de Blanco Caridad María Burunate Gómez la abofeteo y golpeó durante un acto de repudio el 30 de abril de 2012; además, “arrastró por los pies, junto a otros tres sicarios de la dictadura, al sindicalista independiente Iván Hernández Carrillo”.

Precisamente, Hernández Carrillo comunicó en su cuenta en Twitter que Septiem Suárez reside actualmente en Tampa, Estados Unidos. Las organizaciones de derechos humanos lo acusan de los delitos de “asesoramiento y participación en la represión, lesiones y persecución por motivos políticos”.

Mientras, el OCDH publicó en Twitter que la capitana Amparo Álvarez ha sido jefa del Destacamento 22 de la prisión Kilo 9, en donde ha estado presuntamente involucrada “en actos crueles y degradantes” contra personas encarceladas.

También se dieron detalles sobre el primer teniente Plácido Ibáñez, un oficial de orden interior en la prisión de Kilo 7, y el primer suboficial Pedroza Machado, funcionario del Orden Interior.

Sobre este último, el OCDH agregó que integra el pelotón de otro oficial nombrado Daniel Primelles Cala, quien ya había sido identificado como presunto autor de “actos que constituyen violaciones de derechos humanos y/o actos crueles inhumanos y degradantes”.

Recientemente, el OCDH registró más de 5499 acciones represivas en Cuba en el 2022 y exhortó a “sancionar o continuar sancionando, individualmente, a los violadores de derechos humanos, bajo los principios de las leyes Magnitsky y otros programas de rendición de cuentas de EE. UU., la Unión Europea, Canadá, Australia, Reino Unido y otros países”.