Santiago de Cuba, Cuba- Liuber Caballero González, Ernesto Salazar Rodríguez y Asdrúbal Kindelán Garbey fueron trasladados en días recientes a la prisión Aguadores, en Santiago de Cuba. Los tres se encontraban detenidos en el Centro de Operaciones y de Instrucción Penal, ubicado en el reparto Versalles, por ejercer su derecho a la libertad de expresión de forma pacífica.

El traslado de Liuber Caballero ocurrió el martes 2 de abril, luego de 20 días encarcelado por subir a su muro de Facebook publicaciones críticas hacia el régimen cubano en el contexto de una protesta ocurrida en el reparto santiaguero Micro 3. El 13 de marzo le fue comunicado el arresto a través de una llamada telefónica, lo condujeron al sector policial de su zona y posteriormente fue trasladado a la unidad de Operaciones.

Liuber Caballero. Foto publicada en su perfil de Facebook

Tres días después ocurrió el traslado de Ernesto Salazar junto a otros de los manifestantes de El Cobre detenidos los días 17 y 18 de marzo por las protestas en esa localidad santiaguera. En el caso de Salazar, su arresto implica además una violación a la libertad de expresión, pues como pudo apreciarse en un video que se viralizó, este ciudadano solo hizo reclamos públicos a los oficiales reunidos delante de la estación policial.

Ernesto Salazar. Foto publicada en el perfil de Facebook de Omar Sayut Taquechel

En cuanto a Asdrúbal Kindelán, este había sido arrestado el 23 de marzo por realizar una directa frente al centro de operaciones de Versalles, a donde llevaron detenido a su hijo por supuestamente aparecer en un video de las protestas en Santiago de Cuba. El 28 de marzo fue excarcelado con una fianza de 50 mil pesos y acusado del delito de Desacato.

Tras su liberación, Kindelán continuó denunciando en las redes y a medios independientes la situación de injusta prisión de su hijo, hasta que el 2 de abril recibió una citación para presentarse al día siguiente en la 2da estación policial, conocida como El Palacete. Cuando acudió a la cita, Asdrúbal fue arrestado bajo una nueva acusación de “atentado”, presentada por el mayor Oscar Sánchez Silega.

Según este oficial, Assdrúbal lo habría amenazado cuando en una reunión con la instructora del caso de su hijo pronunció la frase “Van a pagar por lo que están haciendo” que, según su esposa, quien estuvo presente en el encuentro, ni siquiera es cierto que lo haya dicho. Por otra parte, de haber ocurrido, no es motivo para asumirlo como una amenaza física, pues podría referirse a pagar ante la ley. Además, como señaló su hermano en una directa, ellos ni siquiera conocen en persona a este mayor, ya que nunca quiso atenderlos cuando se presentaron en el centro de operaciones de Versalles a indagar por el hijo de Asdrúbal detenido en ese lugar.

Asdrúbal Kindelán. Foto publicada en su perfil de Facebook

A decir de Giselle Morfi Cruz, abogada de la organización legal independiente Cubalex, estas personas que son llevadas a centros penitenciarios pudieran estar hasta un año y seis meses, contados desde la resolución de inicio del expediente, en prisión provisional sin ser sometidos a juicio, según la legislación cubana.

Estos traslados desde centros de instrucción a cárceles se suman al de Víctor Manuel Hidalgo Cabrales, en Las Tunas, el pasado 29 de marzo, y marcan un patrón de represión más acentuado contra personas que han ejercido la libertad de expresión en el contexto de las protestas del mes de marzo.