Artemisa, Cuba, (ICLEP). Las madres de niños en edades comprendidas entre 0 y 7 años, los únicos menores que tienen derecho a este alimento en Cuba, rechazan la mala calidad de la leche fluida que adquieren en la bodega artemiseña La Trinchera.

Vivian Quintero Báez, vecina de la calle Mártires y madre de un niño de tres años, denunció a Majadero de Artemisa que la leche de la bodega es agua, no tiene sabor a nada y se corta con facilidad a los pocos minutos de llegar a la bodega.

“A mi hijo le estoy dando refresco de desayuno. Al menos yo, no me atrevo a darle esa agua a mi hijo, aunque no secorte. Cuando usted escucha la propaganda de Radio Artemisa, en la información que dan dicen que ya está servida en las bodegas la leche para niños menores de siete años, como si de verdad fuera leche”, concluyó Quintero Báez.

Mariana Claribel Malagón, abuela residente en la calle 25, confirmó a este medio que desde hace tres días consecutivos “la leche que le toca a su nieta se le corta”, lo cual obliga a su hija, la madre de la niña, a emplear refresco y jugo “de lo que aparezca” para el desayuno de la menor.

“Nosotros no podemos emplear 1 900 pesos para comprar un kilogramo de leche en polvo en las Mipymes, cuando no hay dinero ni para comer”, agregó. El bodeguero del establecimiento Las Trinchera, Alberto Alemán, dijo a reporteros de Majadero que la leche está llegando temprano, antes de las 10:00 de la mañana, pero en la bodega no tienen equipo de refrigeración, por lo que se corta. “Esto lo sabe Leche en mal estado, añadió.

Publicado originalmente en la edición 197 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Majadero de Artemisa