Santa Clara,Cuba, ICLEP). La decisión de las autoridades de Inspección Popular de cerrar la cafetería que ofrece alimentos en el interior del hospital Arnaldo Milián Castro, provocó insatisfacciones y quejas de la población que acude a ese lugar.

Diana Villares, una vecina del reparto Condado que lleva 28 días con un familiar ingresado, le dijo al autor de esta nota, que muchas personas que se encuentran en ese centro de salud solo tienen la opción de comprar alimentos en esa cafetería.

“El gobierno no garantiza la venta de alimentos para el pueblo y tampoco facilita el trabajo de los que lo hacen en los puntos privados. No les ayudan con materias primas a precios accesibles para elaborar sus productos y les cobran impuestos altísimos. Eso de que se quitarían trabas, solo es un cuento más de Miguel Díaz Canel”, aseguró Villares.

Miguel Alejandro Pérez, trabajador del mencionado establecimiento gastronómico, le informó a nuestra redacción, que la decisión de cerrar el lugar se debió, a que no pudieron demostrar la procedencia de alimentos como el queso y la harina de trigo que son utilizados para la elaboración de pizzas, así como la del azúcar moreno, empleada en los jugos y refrescos.

“Los inspectores llegaron de imprevisto y pidieron que les mostráramos los documentos de los productos que ofertamos, eso es casi imposible porque en las tiendas en MLC no entregan facturas, solo vales de compra que son ilegibles cuando pasan unos días. Tampoco las recibimos de los campesinos a los que les compramos el queso y las frutas”, refirió. El señor Pérez opina, que todas estas inspecciones solo consiguen entorpecer los servicios que se prestan, en un momento en que la población los necesita más que nunca.

Publicado originalmente en la edición 99  del medio de comunicación comunitario del ICLEP,  Páginas Villareñas.