Camagüey, Cuba- Ienelis Delgado Cué, prisionera política recién liberada, fue detenida el pasado martes por la Seguridad del Estado y amenazada con regresar a la cárcel por realizar una directa en la red social Facebook.

Ese día recibió una llamada desde la 2da estación policial de Camagüey, informándole que su hijo se encontraba detenido y que debía personarse en el lugar para presenciar un careo al que sería sometido junto a otro menor, por una supuesta amenaza formulada dos meses atrás. Poco después de llegar se presentó la Seguridad del Estado en la unidad y la llevaron detenida para la sede de esta institución en el reparto Garrido, conocida como Villa María Luisa. Según declaraciones de Ienelis Delgado, todo esto fue una treta organizada por la policía política para arrestarla, pues saben que ella no asiste a citaciones arbitrarias.  

El motivo de la detención fue amenazarla por una directa que realizó el domingo a través de su perfil de Facebook Mambisa Agramontina. En la transmisión, denunció la injusticia del encarcelamiento de Aniette González por un supuesto delito de ultraje a los símbolos nacionales, mientras que en las instituciones estatales usan banderas desteñidas y en mal estado. “Ultraje es poner esta bandera al lado de la del Movimiento 26 de Julio. Porque la bandera del 26 de Julio pertenece a un movimiento terrorista”, dijo la activista, quien anunció además que se unió a la organización opositora Cuba Primero.

Denunció también la situación de las presas políticas, los maltratos y manipulaciones a las que son sometidas por la Seguridad del Estado y las autoridades penitenciarias.

“Yo sé lo que pasa un preso político. Yo sé cómo te niegan la asistencia médica, porque lo viví. No es porque nadie me lo contó. Lo sufrí en carne propia. Y si no pasé más fue gracias a la gran madre que tengo, que nunca dejó de hacer una denuncia. Por eso hoy le digo a los familiares de los presos políticos: denuncien. Porque la represión siempre va a estar y hay represión porque les molestan las denuncias. Porque las denuncias influyen. Entonces, denuncien. Si ya estamos presos, a dónde nos van a llevar. Vamos a denunciarle al mundo que en Cuba hay una dictadura represora”, dijo.

Ienelis Delgado mencionó nombres de oficiales de la Seguridad del Estado de la provincia involucrados en la represión, como Rubiel Valdivia, alias Michel; Miguel Hermida, alias Kevin, y la mayor Claudia y denunció el trato cínico que le profesó la capitana Yaima Cano Castillo, jefa de la prisión provincial de mujeres de Camagüey, Granja 5, mientras estuvo recluida en ese centro penitenciario. Además, agradeció a las personas del exilio que la ayudaron con alimentos y medicinas los nueve meses que estuvo detenida.

Los oficiales de la Seguridad que la interrogaron este sábado consideraron que con sus palabras estaba incitando a los familiares de los presos políticos a realizar denuncias y que había difamado a la jefa del penal. Además, le dijeron que su agradecimiento al exilio podía asumirse como evidencia de que recibía financiamiento externo para realizar acciones contrarrevolucionarias, por lo que en cualquier momento podían detenerla y decomisarle el dinero que llevara encima.

Le advirtieron que podían acusarla nuevamente de Desacato, esta vez en su modalidad agravada, una figura del Código Penal cubano que atenta contra la libertad de expresión y que el régimen emplea con frecuencia para perjudicar jurídicamente a opositores y activistas. Fue liberada alrededor de las cuatro de la tarde.

Ienelis Delgado Cué, activista por los derechos humanos en Camagüey, había sido excarcelada el pasado 29 de diciembre de 2023, tras extinguir íntegramente una sanción de nueve meses de privación de libertad por un supuesto delito de desacato. Durante su estancia en prisión fue víctima de varias formas de hostigamiento como decomisos, negación de atención médica y asistencia religiosa, así como acoso por parte de presas comunes. También le fue violado su derecho de queja y a la libertad de expresión cuando le suspendieron por dos meses las llamadas telefónicas, como represalia a las denuncias que realizaba desde el penal.

Esta nueva detención, a poco tiempo de haber salido en libertad, confirma que continúa el patrón represivo en su contra por expresar abiertamente su desacuerdo con el régimen castrista y el comunismo. Antes de entrar a prisión, Ienelis Delgado había sido multada con el Decreto-Ley 370 por una directa en Facebook realizada en octubre de 2022, en la que cuestionó que otras provincias no se sumaran a las protestas que estaban ocurriendo en La Habana por esas fechas.