La Habana, Cuba, (ICLEP). La escasa ventilación y el cúmulo de personas de pie por la marcada insuficiencia de asientos, han convertido al salón de lista de espera de la terminal La Coubre en un “horno humano”, según la opinión a este medio de un capitalino.

El desespero por un cupo para viajar al resto del país, en gran medida a la zona oriental del territorio nacional, en medio de una transportación interprovincial estatal prácticamente colapsada, hacen de La Coubre un sitio de inhóspita estancia. Solo mencionar que al lugar acuden diariamente miles de personas, y a un local reducido.

Kabir Castellanos Chacón, chofer de un bicitaxi y residente en la calle Omoa del municipio Cerro, expresó a Amanecer Habanero: “Aquello allí no hay quien lo soporte. El gentío, unos encima de otros respirándose arriba. Nada más hay que sacar la cuenta que por cada libro de espera apuntan a mil personas y son una pila de libros”.

Yudith Hidalgo Álvarez, dependiente en una cafetería privada y vecino de la calle Clavel, en Centro Habana, expresó al boletín: “Entre el maltrato de los empleados, que también están sin oxígeno allá adentro, el calor y la cantidad de gente, a uno le dan ganas hasta de llorar cuando está allí”.

Néstor Miranda Cabrera, funcionario de la Dirección General de Transporte de La Habana, dijo a los reporteros: “Por el momento no hay otra solución, otro local disponible. Aunque analizaremos la situación de La Coubre con más detenimiento, lo puedo asegurar”.

Publicado originalmente en la edición 246 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Amanecer Habanero