Yennis Artola del Sol, se encuentra en una situación judicial crítica tras ser acusada por la Fiscalía de Camagüey por el supuesto delito de "propaganda enemiga". La aplicación de este cargo, que atenta contra la libertad de expresión, resulta preocupante en el contexto de las protestas de agosto de 2022 en el municipio Nuevitas en Camagüey.

A Yennis Artola se le imputa el delito de "propaganda enemiga" por pintar carteles con frases contestatarias y subir sus fotos a las redes sociales. Estas acciones, que en otros contextos serían manifestaciones de expresión artística y opinión, se consideran ilícitas según la legislación cubana.

Artola fue detenida pocos días después de las manifestaciones y posteriormente la trasladaron hacia la prisión de mujeres de Camagüey, conocida como Granja 5, donde enfrenta una petición fiscal de 10 años de cárcel.

Desde su reclusión en la prisión de mujeres de Camagüey, la presa política ha sido sometidas a torturas psicológicas y malos tratos, recluida junto a prisioneras de alta peligrosidad y privadas de una adecuada atención médica.

El Código Penal cubano de 1987 define el delito propaganda enemiga – renombrado como propaganda contra el orden constitucional en su sucesor de 2019- como acciones orientadas a incitar contra “el orden social, la solidaridad internacional o el Estado socialista, mediante la propaganda oral o escrita o en cualquier otra forma”, la difusión de “noticias falsas o predicciones maliciosas tendentes a causar alarma o descontento en la población, o desorden público” así como la confección, distribución o posesión de “propaganda” con estas características. Si dichas acciones se realizan utilizando medios de difusión masiva, las penas pueden ser hasta de quince años de privación de libertad.

https://iclep.org/post/acusan-de-propaganda-enemiga-a-dos-manifestantes-de-nuevitas/