Güines, Mayabeque, Cuba - Superan actualmente los cien mil pesos el coste de los generadores eléctricos ante los constantes apagones por el déficit energético en que la dictadura tiene sumido al país.

Ante esta situación el precio de estos generadores se ha duplicado, dependiendo del tamaño y la cantidad de Watts que generen, pudiendo costar hasta un millón de pesos cubano al cambio actual los de mayor potencia.

A pesar de que los generadores o plantas eléctricas, como popularmente se les conoce, se han convertido en una fuente de alivio para los hogares güineros, su alto coste impide totalmente que los cubanos de a pie que viven de su salario puedan adquirirlas.

Los apagones por las constantes roturas de las termoeléctricas del país también han incrementado el número de importaciones de estos equipos, generando además gran desigualdad social entre quienes pueden tenerla y quienes solo pueden soñarlo.

“Un apagón de por sí es doloroso, pero cuando uno ve casas encendidas con plantas y otras no, ahí es donde nos damos cuenta de como hay personas en la clase más baja que no pueden ni soñar con tener una”, comentó el güinero Federico Hernández.

De igual forma, la señora Marisol Prieto señaló que “las plantas son muy buenas, pero lo mejor es que no se vaya la corriente, en eso es en lo que tiene que trabajar el gobierno de este país y no hacer tanta política por la televisión”.

Las persistentes roturas y averías del sistema electoenergético nacional ha impulsado la adquisición de estos equipos generadores por parte de la población, situación que además ha repercutido considerablemente en el consumo de combustible, el cual se ha disparado también generando al igual que en la electricidad un déficit en este sector.

Ante este incremento, la dictadura ha reducido la venta de combustible a los propietarios de plantas a solo cuarenta litros de gasolina por semana, dificultando así la utilización de los generadores.

Publicado originalmente en la edición 132 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Cimarrón de Mayabeque.