La Habana, Cuba - Los familiares de los prisioneros políticos José Ramón Solano Randiche, Juan Enrique Pérez Sánchez y Yonay Moreu Leal, denunciaron a Martí Noticias la situación que padecen los reclusos en cárceles del sistema penitenciario de Cuba. El activista de derechos humanos Marcel Valdés, también reveló el estado actual de salud del prisionero Ángel Serrano Hernández, todos recluidos por sus participaciones en las manifestaciones del 11 de julio de 2021.

Solano Randiche, de 32 años, se le niega acceso a sus medicamentos para el asma en la cárcel de Cuba Sí, en la provincia de Holguín, según informó su esposa Liuba María Gallo, a dicho medio de comunicación. 

“Él es asmático crónico desde muy chiquito y entonces por el calor que hace allí, la humedad, él está ahora presentando una crisis, no hay medicamentos ahí, la comida malísima, prácticamente cabe en un vaso de seis onzas casi todo, las condiciones higiénicas también son malas”, aseguró la conyugue.

Actualmente, el preso político cumple una condena de 13 años de cárcel, acusado por el supuesto delito de "sedición", tras lograr una reducción de la sentencia ante el Tribunal Supremo Popular.

Por otra parte, en múltiples ocasiones se ha denunciado la situación del preso Juan Enrique Pérez Sánchez, condenado a ocho años de cárcel sanción que cumple en el centro penitenciario de Quivicán, en Mayabeque.

El prisionero político de 42 años y padre de cuatro hijos fue acusado por los presuntos delitos de "desórdenes públicos", "desacato" y "sabotaje", por su participación en las protestas en el poblado de Vegas, en el municipio mayabequense de Nueva Paz.

A fines de septiembre, Pérez Sánchez se cosió la boca con alambre en reclamo contra los abusos en su contra por parte de las autoridades del penal, quienes le niegan las llamadas telefónicas familiares y salidas al patio de la prisión. Recientemente, se descosió la boca.

“El labio de arriba, por la parte de adentro lo tiene infestado, parte de las cosas que yo le llevaba a él me las quitaron, la mayoría de los antibióticos no se los pude pasar”, declaró su esposa Dayana Aranda Batista, a Martí Noticias.

El medio de comunicación también recibió la denuncia del preso político Yonay Moreu Leal, condenado a 15 años de privación de libertad por el supuesto delito de "sedición", tras las protestas ocurridas en el municipio de Cárdenas, en la provincia de Matanzas.

Su cónyuge, Nilaismary Álvarez, dijo al Consejo de Relatores de Derechos Humanos que su esposo “sobrevive en una galera entre peligrosos asesinos donde su vida corre peligro, y donde carece hasta del agua y la alimentación adecuada", publicó el diario con sede en el territorio estadounidense de la Florida.

Moreu Leal, permanece recluido en la prisión de Agüica en Colón, y se encuentra bajo la amenaza de prisioneros comunes de alta peligrosidad.

Por último, está el caso del preso político Ángel Serrano Hernández, de 56 años, condenado a 14 años de privación de libertad por el supuesto delito de "sedición", por su participación en las manifestaciones de La Güinera, en La Habana.

“Me pidió que denunciara que él tiene problemas de la próstata y no le han hecho ningún tipo de examen médico, no le dan atención médica y mucho menos le dan medicamentos, tiene artritis y los dolores son inmensos, son gente súper pobre”, expresó el activista político Marcel Valdés.

Serrano Hernández se encuentra sin recibir atención médica en la prisión de máxima seguridad y severidad Combinado del Este, aseguró el propio activista cubano.

Justicia 11J, organización no gubernamental, identificó 1558 personas detenidas por razones políticas en cárceles del régimen cubano, relacionadas a las históricas protestas de 2021.