Artemisa, Cuba. Los féretros pasaron esta semana a convertirse en otro renglón deficitario en el municipio San Cristóbal, pues para dar sepultura a un difunto hubo que importar un cajón fúnebre desde Candelaria. Así reza la denuncia proveniente de Moraima López Orta, con domicilio en calle 3 entre 19 y 21, en San Cristóbal, y vecina de Humberto Ramos Pita, quien este 16 de febrero debió permanecer tendido en el hospital de ese municipio durante más de siete horas, en espera de un féretro.

Yolanda González Torrens, residente en la calle Pueblo Nuevo e hija de otro difunto, declaró a este medio: “Mi padre falleció en la casa y no fue hasta cuatro horas después que el carro vino a buscarlo. Dicen que no había caja. No solo eso, tuvimos que lucharla, cada vez que llamábamos decían que había que esperar a ver de cuál municipio se podía traer una”. Ernesto Sánchez Quintana, trabajador de la funeraria en la ciudad capital provincial, aseguró a Majadero de Artemisa que en estos momentos hay crisis seria con las cajas fúnebres. “Estamos dependiendo de Candelaria o Alquizar”, apuntó. Humberto había fallecido a las 5:00 de la mañana, pero afectos cercanos y amigos, que lo esperaban desde las 6:00 en la funeraria, tuvieron que aguardar durante seis horas, hasta las 12:00 meridiano, para iniciar el velatorio.

Publicado originalmente en la edición 187 del medio de comunicación comunitario del ICLEP,  El Majadero de Artemisa.