La Habana, Cuba - El periodista oficialista camagüeyano Robert Estévez Chantada, renunció públicamente a ejercer el periodismo en la isla. Según una publicación en su muro de Facebook, que fue eliminada más tarde, sería una decisión “difícil” pero “definitiva”.

“Hoy pongo punto final a lo que una vez fue el sueño de mi vida, renuncio a ejercer el periodismo. Una decisión que me devuelve la calma y a la vez me causa preocupación”, publicó Estévez Chantada.

De acuerdo con el medio ADN Cuba, el joven expresó que no le interesa “volver a ejercer la profesión”. “Desde hoy trataré de encontrar un nuevo camino alejado de cualquier medio de prensa. Trataré de alcanzar nuevos sueños”, aseguró.

El reportero expresó que le queda la satisfacción de haberle dado a su madre el título universitario que deseaba, “llenarla de orgullo y tratar de desempeñar la profesión” como él entendió que el pueblo merecía.

Del mismo modo, casi 30 periodistas por presiones de la policía política, han renunciado públicamente a ejercer su profesión, en lo que va de año, entre los que destacan los del medio digital el Toque.

Mientras que durante el 2022 muchos comunicadores voceros del régimen abandonaron el oficialismo cubano y más tarde arribaron a otros países, la mayoría de ellos a los Estados Unidos. Entre los nombres que el Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP), ha registrado se encuentra la periodista oficialista Saily Pérez Gordillo y su pareja, el actor y presentador Gabriel Ricard.

También huyeron de la propaganda comunista los reporteros Juan Gabriel Gordín, Maray Suárez, Raúl Almeida Peláez, Yailén Insual Alarcón y Boris Fuentes.

Asimismo, entre otros, lo hicieron los presentadores de radio y televisión Yunior Smith, Amanda Toira, Jorge Luis Ríos García, Dyelsi Jiménez, Alejandro Quintana, Frank Abel Gómez, Carlos Alejandro Sánchez Rodríguez e Isabel Fernández.

El presidente de la Unión de periodistas de Cuba (UPEC) de la provincial de Ciego de Ávila, Jorge Luis Delgado Felipe, emigró a Estados Unidos, para convertirse en uno más de los voceros de la dictadura cubana que abandona la isla en este 2022.