Yeris Curbelo Aguilera. Foto tomada de su perfil en Facebook.
Por ICLEP
May 26, 2025 | 8:55 AM
El Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) denuncia una nueva forma de represión contra el periodista independiente Yeris Curbelo Aguilera, encarcelado en el centro correccional A500, anexo a la prisión Combinado de Guantánamo, donde cumple una condena de dos años de privación de libertad tras cubrir las protestas populares de Caimanera, el 6 de mayo de 2023.
Aunque Curbelo Aguilera no ha ejercido el periodismo desde su encarcelamiento —debido a las restricciones del sistema penitenciario cubano—, las autoridades carcelarias le han negado arbitrariamente el derecho al trabajo penitenciario, sin ofrecerle justificación legal ni disciplinaria. De acuerdo con su esposa, Odalis Legrá Castellanos, es el único interno del penal al que no se le permite trabajar, a pesar de que el centro opera bajo un régimen de menor severidad que contempla labores agrícolas, de construcción o limpieza con remuneración.
Esta exclusión no puede entenderse como una simple omisión administrativa. Se trata, en cambio, de una medida punitiva dirigida a prolongar el castigo impuesto por su labor informativa antes del encarcelamiento, y por tanto, una violación indirecta, pero efectiva, de su libertad de prensa.
El ICLEP sostiene que esta represalia institucional constituye una violación a la libertad de prensa por las siguientes razones:
Desde el ICLEP denunciamos que:
Negar sin justificación el derecho al trabajo a un preso político —que fue encarcelado por informar— es una forma de censura que atenta contra los principios de dignidad, legalidad y reinserción social, recogidos en instrumentos internacionales como las Reglas Mandela y el artículo 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.
Exigimos:
Silenciar a un periodista encarcelado, no con mordazas sino con la exclusión y el castigo arbitrario, es otra forma de censura. La libertad de prensa también se defiende entre rejas.