La Habana, Cuba - El régimen cubano, a través del Tribunal Provincial Popular de La Habana (TPP), impuso un total de 75 años de privación de libertad a 15 manifestantes del 11 de julio de 2021 (11J), entre los que se encuentra el joven Jonathan Torres Farrat, condenado a cuatro años sin internamiento por el delito de sedición.

De acuerdo con una nota de Diario de Cuba, la sentencia del 23 de enero vista por la agencia española EFE, manifiesta que las penas van desde los cuatros años de libertad limitada hasta los 13 de prisión.                     

Según sostiene el reporte, el veredicto que aún no es firme por lo que puede ser recurrido, corresponde a un juicio realizado en noviembre del pasado año en el que se juzgaba, entre otros, a Jonathan Torres, uno de los 59 menores de edad que fueron detenidos en las históricas protestas populares.

En esa fecha (noviembre del 2022), Bárbara Farrat, madre del joven manifestante, informó en su perfil en Facebook que una semana antes del juicio la Fiscalía le cambió a Jonathan los cargos de atentado y desorden público, con los que enfrentaba ocho años de prisión, por el de sedición.

Asimismo, la agencia española manifiesta que solo tres presos políticos pasarán a régimen de menor severidad, es decir, campamento; mientras que otros tres manifestantes serán encarcelados, sin dar más detalles.

La nota publicada por Diario de Cuba señala que el TPP consideró como hechos probados que los condenados se movilizaron en el habanero municipio de Arroyo Naranjo “con el propósito de generar la desestabilización del orden social y político establecido en la República de Cuba”.

También fueron acusados de tirar piedras y gritar consignas contra el presidente Miguel Díaz-Canel y al menos tres de los juzgados “negaron haber estado presentes durante los hechos”.

En el juicio, como indica el reporte, el cambio de los delitos de atentado, desórdenes públicos, desacato e instigación a delinquir por el de sedición, molestó a al menos dos de los abogados, pues este delito revela “una intención de desestabilizar el orden del Estado”, según el actual Código Penal cubano.

Los letrados objetaron que el delito no se sostenía, pues los 15 acusados “participaron en una manifestación que ocurrió lejos de las sedes de los poderes del Estado cubano”.

Las organizaciones independientes Justicia 11J y Cubalex, han registrado hasta el momento unas 700 sentencias contra los manifestantes del 11 de julio, con penas de hasta 30 años de prisión por sedición.