Pinar del Río, Cuba, (ICLEP). El pasado 29 de noviembre comenzó a realizarse un operativo por parte de policías e inspectores estatales en contra de las ilegalidades que se llevan a cabo en el sector privado pinareño.

En el poblado de La Coloma fue donde más se sintió esta redada por lo que muchos negocios privados cerraron sus puertas. Realmente, todo el pueblo sabe que dicho operativo se realizó para oprimir y obstaculizar el trabajo de aquellos que con mente capitalista quieren desarrollar su propio negocio, y salir adelante en un país que se cae a pedazos.

Iván Ledesma, cuentapropista del poblado, contó al boletín: “Por lo general, en otras ocasiones los inspectores vienen buscando qué pueden llevarse, no es que vengan a controlar, es que al ser parte de la mafia de este país quieren llenarse los bolsillos. Pero al venir con operativos policiales ya la cosa cambia, son mucha gente buscando de dónde agarrarse para dificultarte la vida, por eso tomé la decisión de cerrar mi negocio hasta que esto pase”.

“Yo cerré mi local y por un grupo de WhatsApp que poseo voy recibiendo pedidos y hago el domicilio, estos estafadores no me van a quitar mi dinero en multas injustificadas con valores que llegan al cielo”, dijo por su parte Seferino Lara Álvarez, otro cuentapropista que lleva su negocio de manera familiar.

No es primera vez que este Gobierno pone trabas burocráticas o manda a sus perros a obstaculizar la labor de los cubanos de pie, que luchan por mejorar sin tener que depender de un Estado tirano.

Publicado originalmente en la edición 279 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Panorama Pinareño