A unas pocas semanas de que llegue el próximo fin de año y con él las acostumbradas celebraciones que estas fechas conllevan, muchas de nuestras familias no saben que van a comer y que van a beber en las tradicionales cenas del 24 y el 31 de diciembre.

Muchas preocupaciones se acumulan en las mentes de los ciudadanos de a pie que no ganan o reciben dólares del extranjero y tampoco cuentan con suficiente dinero en moneda nacional, para pagar el elevado precio a que se venden en la actualidad la carne de cerdo, la cerveza, el arroz y los frijoles, productos infaltables en las mesas de los cubanos en esta etapa del año.

Luis Orlando Ramos, vecino de la calle Cuba, le aseguró a nuestro medio, que su familia y muchos de sus vecinos, ya perdieron las esperanzas de poder celebrar con las comidas tradicionales de fin de año. “Ni siquiera durante los años del Periodo Especial el pueblo cubano sufrió tan profundamente la falta de alimentos en los días de fin de año y nunca estuvieron tan caros.

El cerdo ya cuesta 500 pesos la libra, el arroz 180 y los frijoles a 450 la libra, las bebidas alcohólicas y los dulces también son inalcanzables para los trabajadores”, aseguró. El señor Ramos opinó, que la incapacidad del gobierno provincial para garantizar estos productos a precios asequibles en los mercados, harán que este fin de año sea unos de los peores que ha vivido el pueblo santaclareño en las últimas décadas.

Orestes Agüero, funcionario de Comercio y Gastronomía, le informó a nuestra redacción, que en los restaurantes y cafeterías estatales, tampoco se ofertarán las cenas de fin de año.

“Lamentablemente las familias que tradicionalmente acudían a nuestros centros a cenar o adquirir los combos de comida cubana que ofertábamos para llevar, no podrán hacerlo porque no contamos con los alimentos que se requieren”, explicó Agüero.

A pesar de las muchas limitaciones que viven los cubanos, causadas por la incapacidad del régimen cubano para garantizar los alimentos, las familias hacían lo imposible para cenar dignamente los fines de año, lamentablemente en esta ocasión muy pocas lo conseguirán.

Ojalá que el nuevo año le traiga a nuestro sufrido pueblo la tan ansiada libertad, y que el próximo fin de año todos los cubanos podamos cenar con un buen arroz con gris acompañado de carne de cerdo asada y la infaltable cerveza fría.

Publicado originalmente en la edición 108  del medio de comunicación comunitario del ICLEP,  Páginas Villareñas.