Güines, Mayabeque, Cuba, (ICLEP). La constante escasez de harina de trigo, así como la mala calidad en la elaboración del pan normado, ha situado a este producto en el epicentro de las críticas de la población güinera. Varios han sido los factores que han influido en la decadente calidad del pan: la falta de aceite y de levadura para la fermentación de la masa, y los constantes apagones que ponen contra reloj la elaboración del alimento.

Otro de los puntos que ha jugado en contra ha sido la mala calidad de la harina, pues el trigo se está procesando en los molinos sin el tiempo requerido para el secado del grano, lo que produce una harina no apta para realizar un pan de calidad.

Al respecto, el panadero Mario Ruiz Travieso, trabajador de la unidad La Victoria, especificó: “La harina está entrando pésima, la levadura peor y aceite casi nunca hay, se está haciendo el pan prácticamente a machetazos, bastante que está saliendo, aunque sea malo, así no hay quien trabaje”.

De igual forma se expresó el maestro panadero Roberto Argüelles Fonseca, trabajador de la misma unidad: “Sabemos que el pan no sirve, que no tiene ni la calidad ni el peso requerido, que sale con mal aspecto y que la población se queja, pero nosotros estamos trabajando con lo que tenemos o más bien con lo que nos dan, y magos no somos”.

Por su parte, Margoth Díaz Curbelo, vecina de la calle 113, refirió: “Eso es lo único con lo que uno cuenta para que los muchachos desayunen y merienden, y realmente no hay quien le meta el diente ni con hambre, el pan que nos está llegando es una falta de respeto”.

Cabe reconocer que el pan normado nunca ha sido de buena calidad, pero la constante ineptitud del régimen y su desinterés por la alimentación pública lo ha llevado por una espiral de mala calidad irreversible.

Publicado originalmente en la edición 158 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, Cimarrón de Mayabeque