Foto de Mehmet Turgut Kirkgoz en Pexels
Por la periodista ciudadana Yamilet Frometa
Jun 12, 2025 | 10:00 AM
Sancti Spíritus, Cuba,(ICLEP). Los altos precios de venta impuestos a los alimentos y productos de primera necesidad que se ofertan en puntos de ventas no estatales y estatales, no han podido ser controlados por las autoridades del gobierno en la provincia, agravando con ello la crisis que vive la población espirituana.
Las medidas de control y fiscalización y el despliegue de inspectores estatales para controlar los precios de venta no han tenido el efecto esperado por las autoridades del régimen en la provincia.
Pese a que desde inicio de año y hasta el presente, según refiere la radio espirituana, se han movilizado más de 11.000 inspectores, quienes han realizado alrededor de 32.400 acciones con ese fin, los altos precios no se han erradicado.
"El gobierno no puede controlar los altos precios porque eso no se resuelve con multas, sino con productos abundantes. Cuando el estado es capaz de surtir sus mercados con abundantes mercancías, se acaban los altos precios", comentó Ibrahim Camacho Balmaceda, residente en la calle Julio.
A. Mella. Mientras las acciones oficiales no logran contener la crisis, los precios de productos de primera necesidad continúan aumentando de forma descontrolada. Un pomo de aceite se comercializa a 1,500 pesos, un paquete de pollo de diez libras alcanza los 3,700 pesos, la libra de carne de cerdo se vende a 800, y un cartón de huevos puede llegar hasta los 3,000 pesos. Estas cifras resultan inalcanzables para la mayoría de la población , que depende de salarios estatales o pensiones mínimas.
“Es imposible comprar alimentos. Los precios suben todos los días y yo solo tengo una chequera de 1,500 pesos al mes, que apenas me alcanza para los productos normados y pagar la corriente”, lamentó Medardo Quintana Oropesa, un anciano residente en la calle Agramonte.
Por su parte, Nancy Velázquez Pérez, inspectora estatal, reconoció las limitaciones del sistema de control: “Intentamos contener los precios. Hay días en los que imponemos hasta doscientas multas y decretos, pero eso no resuelve nada.
Los vendedores las pagan y continúan vendiendo a escondidas”. Desde enero a mayo del presente año, según refiere el gobierno local, se han impuesto más de 23.600 multas por un valor superior a los 24.850.000 pesos, pero no se logra contener los altos precios que hoy asfixian a la población.
Publicado originalmente en la edición 202 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Espirituano.