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Más de quince días sin recibir el pan normado

Imagen tomada del medio del oficialista del régimen Cubadebate

Por el periodista ciudadano Juan Carlos Mora

Jun 22, 2025 | 10:10 AM


Sancti Spíritus,Cuba, (ICLEP). La población espirituana lleva más de veinte días sin recibir el pan normado correspondiente a la libreta de abastecimiento, debido a la escasez de harina y los prolongados apagones que afectan la producción en las panaderías estatales.

Esta situación priva a muchas familias de uno de los pocos alimentos que aún podían llevar con regularidad a sus mesas. En medio de la actual crisis alimentaria, la ausencia del pan normado afecta de forma particular a niños y ancianos, quienes dependen de este alimento para el desayuno y la merienda.

La falta de distribución ha obligado a muchos ciudadanos a recurrir al pan del mercado informal o a las panaderías privadas (Mipymes), donde los precios resultan inaccesibles para gran parte de la población.

“Llevamos veinte días sin recibir pan, ya no es solo la cuota. Es una vergüenza que este gobierno no pueda garantizar la bolita de pan, que cada día viene más pequeña y de peor calidad”, expresó Alejandro Izaga Sosa, residente en el barrio Jesús María. “Ya no sé qué hacer.

Tengo tres niños y el pan era lo único que podía darles en el desayuno. Hace más de quince días que no lo venden porque no hay harina, y con mi salario de 2,000 pesos no puedo pagar los 150 que cuesta una pieza en la calle. Esto es para volverse loco”, lamentó Damaris Cruz Velazco, vecina del reparto Toyo.

En declaraciones al medio, Edel Taño Bonachea, almacenero de la Empresa Municipal del Pan comentó que la falta de harina de trigo sigue siendo la causa de la falta de pan. Esta se compra fuera de Cuba y no ha entrado ningún cargamento. Debemos seguir esperando, confesó Edel Taño Bonachea, almacenero de la Empresa Municipal del Pan.

Mientras las autoridades no ofrecen soluciones concretas, la incertidumbre crece entre los espirituanos, para quienes el pan normado representa más que un alimento básico: es un símbolo del deterioro sistemático de los servicios y de la incapacidad del régimen para garantizar lo mínimo indispensable.

 

 

 

Publicado originalmente en la edición 203 del medio de comunicación comunitario del ICLEP, El Espirituano.


 

 

 

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